Vitoria. Los recortes sociales se han convertido en el pan nuestro de cada día desde que el Partido Popular (PP) gobierna en la Diputación Foral de Álava y en el Ayuntamiento de la capital alavesa. Los últimos episodios en la carrera por ver quién es el que más adelgaza el actual sistema social llegaron ayer. Uno, en forma de anuncio con boato y altavoz en sede municipal, a la usanza de la presentación de un nuevo proyecto del equipo de gobierno, que no ocultó la autoría sobre el nuevo tijeretazo del Ejecutivo local, que deja sin prestación económica a los jóvenes sin entorno familiar. La segunda mala noticia la desveló ayer el grupo del PNV en el Consistorio gasteiztarra, que para desgracia de las víctimas del nuevo recorte, avisó del próximo cierre de un centro sociolaboral de jóvenes.

En primer lugar, la concejal de Asuntos Sociales, Ainhoa Domaica, tomó ayer la iniciativa para anunciar en rueda de prensa una medida ya avisada con meses de antelación. En concreto, la edil certificó la muerte a partir de este mes de las prestaciones económicas que otorgaba hasta la fecha a jóvenes de entre 18 y 25 años que carecen de entorno familiar y que estaban destinadas a sufragar sus necesidades básicas de alimentación. La supresión llegará a partir de la nómina de mayo. Según avanzó la gestora popular, por este concepto, el Consistorio abonaba en cada caso 658 euros al mes, una cantidad que se redujo desde el pasado febrero un 7% en sintonía con la decisión del Gobierno Vasco de rebajar en ese mismo porcentaje las prestaciones de derecho subjetivo que venía otorgando. En lugar de esa ayuda económica, el Ayuntamiento entregará a estos jóvenes vales para el comedor de Desamparados y, "en aquellos casos en que sea necesario", hasta 125 euros al mes como máximo para complementar la ayuda al alquiler que ya proporcionan las AES y un dinero de bolsillo, también vía AES, de 75 euros", indicó la edil. "Creemos que la ayuda que se venía otorgando es una cantidad económica muy importante y pensamos que disponer de tanto dinero no resulta ni pedagógico ni educativo para estos jóvenes". "Además, es complicado tener un control sobre el destino real de esos fondos y teníamos nuestras dudas sobre si seguían una dieta alimenticia adecuada para jóvenes en desarrollo".

Según datos proporcionados por la concejal, en los últimos cuatro años el crecimiento del capítulo destinado a estas prestaciones municipales ha experimentado un "incremento espectacular del 1.600%". Así se ha pasado de otorgar 97 ayudas en 2008 a 1.673 en 2011.

En estos primeros cuatro meses de 2012, del total de titulares que reciben alguna ayuda económica municipal, 48,9 pertenecen a este grupo de jóvenes. De enero a abril, el Ayuntamiento ha abonado a través de sus diferentes ayudas económicas, 298.000 euros, un 61,2% de ese dinero en este concepto de ayudas a jóvenes. Hasta abril, había 124 personas cada mes que son titulares de esta ayuda. En todos los casos se trata de hogares unipersonales; 113 de ellas son extranjeras, 1 de cada 3 procede de Guinea Conakry; 109 son hombres, con una media de edad de 20 años y de 3,9 años de padrón medio en Vitoria.

Un recurso en problemas En otro orden de cosas, el PNV en el Ayuntamiento denunció la situación límite que se ha alcanzado en el Consorcio para la Educación Compensatoria y la Formación Ocupacional de Vitoria. Este proyecto socioeducativo que ha dado una salida laboral a miles de jóvenes entre los 16 y 20 años desde 1985 acaba de agotar su presupuesto para 2012 (recortado en un 23%) y, de no darse un cambio en la institución municipal, se verá obligado a cerrar sus puertas en junio. Mientras el Gobierno Vasco mantiene su compromiso de financiar la mitad de las necesidades del Consorcio de Educación Compensatoria, el equipo de gobierno municipal redujo de 350.000 a 270.000 euros la aportación del Consistorio para el presente año. Con este recorte, no habrá posibilidad de reabrir las aulas en septiembre. "Éste es el compromiso del PP con la creación de empleo: estrangular económicamente un centro de inserción sociolaboral que cada año permite que una media de 200 jóvenes puedan acceder al mercado de trabajo. Son chicos que no tienen otra alternativa para aprender un oficio y a los que ahora se quiere mandar directamente al paro y la falta de oportunidades", afirmó la portavoz nacionalista en el área de Promoción del Empleo, Nerea Melgosa.

El PNV destacó que la situación que se está generando en el Consorcio para la Educación Compensatoria supone un grave incumplimiento de sus estatutos. "Quieren abocar al cierre un proyecto de inserción laboral".