Vitoria. Muchos recordarán todavía la aparición de mensajes xenófobos en el barrio de Zaramaga, unidos a populosas manifestaciones vecinales, cuando se anunció la construcción de una nueva mezquita en este barrio gasteiztarra. Un distrito que, paradójicamente, ha acogido en su seno a miles de inmigrantes procedentes de otras partes del Estado desde sus inicios y que ahora vuelve a encontrarse con nuevas muestras de intolerancia hacia el diferente.
Mientras se resuelve el contencioso con el Ayuntamiento vitoriano acerca de la ubicación del templo religioso inicialmente previsto en la calle Martín Olave, cuyos impulsores ya contaban con las pertinentes licencias, varias pegatinas con mensajes contra la inmigración han aparecido durante los últimos días en las cercanías de un conocido colegio público del barrio.
Ni por la Junquera, ni en patera, ni en avión. Basta de inmigración. Un contundente mensaje firmado por Nación y Revolución (NyR), una organización juvenil de extrema derecha fundada en el año 2008 y que se define como "antisistema", "patriota" e "identitaria", favorable a "una revolución nacional". El colectivo se opone a la inmigración, la regularización y la legalización de los extranjeros, al tiempo que apoya su repatriación, y se ha aliado en varias ocasiones con otros grupos de extrema derecha para pregonar el rechazo a los inmigrantes en varias manifestaciones celebradas a lo largo del Estado.