Los alumnos vascos de entre 12 y 18 años tendrán acceso en las aulas a una guía educativa en la que se les informará del peligro y de las consecuencias futuras que tiene colgar datos personales o fotografías en Internet. Con ella, se trata de sensibilizar a padres, profesores y alumnos sobre la necesidad de proteger los datos personales en el mundo de las redes sociales y de advertir a los jóvenes de que lo que cuelgan en Internet ahora que son adolescentes queda ahí para siempre.