Roma. Los servicios de rescate italianos localizaron ayer el cadáver de una mujer entre los restos del crucero Costa Concordia, que naufragó el pasado día 13 en aguas de la isla del Giglio, en el litoral de la Toscana, según confirmaron fuentes de la Guardia Costera. El cadáver fue localizado en el área de popa y llevaba el chaleco salvavidas, señalaron las mismas fuentes.
De este modo, la cifra de víctimas en el naufragio se eleva a 12 muertos, entre ellos un turista español y un miembro de la tripulación de nacionalidad peruana, y una veintena de desaparecidos. El personal de rescate continuaba ayer con las tareas de localización y salvamento que, este pasado viernes, quedaron interrumpidas durante la mayor parte de la jornada por un nuevo movimiento del buque.
El jefe de la Protección Civil italiana, Franco Gabrielli, designado comisario especial para gestionar la emergencia tras el naufragio del Concordia, manifestó ayer que no se ha fijado un plazo máximo para las tareas de búsqueda de los desaparecidos.
Gabrielli subrayó que la búsqueda de los desaparecidos, entre los que se cuenta la peruana Erika Soria, de 26 años y que trabajaba como camarera en el crucero, es el objetivo principal. Sin embargo, destacó la necesidad urgente de iniciar lo antes posible con los trabajos de extracción de las 2.380 toneladas de carburante que todavía se encuentran en el interior de la nave, ya que una fuga causaría una catástrofe ambiental.
Gabrielli admitió que "ya se ha producido una contaminación del medio ambiente", puesto que no solo existe el carburante presente en los tanques de la nave, sino que también deben tenerse en cuenta los aceites y disolventes con los que estaba equipado el Concordia. En este sentido, ha pedido un informe para ver si es posible llevar a cabo de forma paralela las tareas de búsqueda de los desaparecidos y las de extracción del carburante.
