Bilbao. Un okupa de 25 años dejó ayer a oscuras a 12.000 usuarios en el entorno de Zorrotzaurre al intentar acceder a una fábrica abandonada y recibir una descarga de 30.000 voltios. El joven sufrió quemaduras en los brazos y las piernas que obligaron a trasladarle al hospital de Cruces, aunque su vida no corre peligro. El apagón se produjo después de que Mohamed recibiera la fuerte descarga al acercarse a un transformador mientras trataba de entrar en el pabellón de la empresa Cromoduro, ahora inactiva. Mohamed trató de "colarse" en el interior del edificio por una ventana y le alcanzó el arco voltaico del transformador. "Ha recibido una descarga de 30.000 voltios que le ha dejado atrapado en un hueco de medio metro entre el transformador y la pared", explicó Andoni Oleagordia, director de Seguridad Ciudadana del Consistorio.
Según indicó a DEIA Patricia, la pareja del herido, el pabellón se encontraba abierto, ya que, en ocasiones, "un conocido chatarrero de la zona" accede al interior, "con permiso de los propietarios", para llevarse la chatarra. "Mohamed le suele ayudar y al acabar se habrá quedado porque vivimos de okupas en la casa de al lado", reconoció la joven.
La nave industrial pertenece a la empresa Cromoduro, que hace ahora un año entró en proceso concursal y el pasado mes de mayo comenzó el proceso de liquidación. Tras el incidente, los bomberos cerraron todos los accesos al edificio y se dejó el pabellón sin energía.
Para posibilitar el rescate, SOS Deiak ordenó a Iberdrola que cortara el suministro eléctrico del pabellón. De lo contrario, ni los bomberos ni los sanitarios podrían haberse acercado al joven por el riesgo de que ellos mismos recibieran una descarga. Una vez eliminado el peligro, comenzaron los trabajos para extraer a Mohamed del hueco donde quedó atrapado.
Los alaridos de dolor del joven se escuchaban desde el exterior de la nave industrial cada vez que sanitarios y bomberos realizaban algún movimiento para liberarle. "Por lo que me han dicho tiene los brazos y las piernas quemadas, pero por los gritos creo que tendrá algo roto", interpretó Patricia visiblemente afectada.
Finalmente, en torno a las 17.35 horas, los bomberos consiguieron liberar al joven que solo alcanzaba a decir: "¡Ay ama, mis piernas!", mientras le introducían en la ambulancia. Mohamed fue trasladado en una UVI móvil a la Unidad de Grandes Quemados del hospital de Cruces.
Como consecuencia del corte en el suministro, en torno a 12.000 clientes de la compañía eléctrica permanecieron sin luz durante casi una hora. Según fuentes de la empresa, el corte se efectuó a las 16.37 horas; 40 minutos después el 10% de los abonados recuperaron la luz y, poco después, el 97% de los clientes tenían tensión eléctrica "mediante otros canales". El corte afectó a los barrios de Zorrotzaurre, Basurto, Zorrotza y parte del centro de la ciudad, como Sabino Arana. El número de abonados sin suministro eléctrico fue de 12.000 clientes. Si bien la cifra de afectados pudo ser mayor y llegar a superar los 36.000 afectados teniendo en cuenta que en la zona de influencia del corte de eléctrico se emplazan numerosas empresas y oficinas.
Tráfico de cocaína Por otro lado, agentes de la Ertzaintza detuvieron el martes por la noche en Vitoria a un hombre de 47 años por presunto tráfico de cocaína. Al arrestado se le incautó una pequeña cantidad de esa sustancia y dinero procedente del tráfico de drogas, según informaron fuentes del Departamento vasco de Interior en un comunicado.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 21.30 horas. Fue entonces cuando varios efectivos de la Ertzaintza que se encontraban en las inmediaciones de un local hostelero de la capital alavesa procedieron a la identificación de una persona sospechosa que salía del local, quien les comunicó que acababa de comprar una pequeña cantidad de cocaína.
Acto seguido, los agentes entraron en el local y uno de los clientes se desprendió de una bolsita y de una cantidad de dinero. Tras recoger del suelo los efectos que había tirado el cliente, los ertzainas verificaron que se trataba de una pequeña cantidad de cocaína, y 115 euros, presuntamente procedentes de la venta de sustancias ilegales, según apuntaron desde Interior. Ante tales evidencias, los agentes de la Policía vasca procedieron a la detención del individuo, que quedó bajo arresto acusado de un delito de tráfico de drogas.
