sevilla. El que era en enero de 2009 jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía, aseguró ayer que Miguel Carcaño le confesó que había matado a la joven sevillana Marta del Castillo y le indicó el lugar exacto desde donde él y el también acusado Samuel Benítez tiraron el cuerpo al río Guadalquivir.

Relatado que, estando ya detenido, Miguel dijo que necesitaba ir al médico por una alergia que padecía, por lo que este agente, junto a un compañero, decidieron trasladarlo para que acudiera al médico.

Una vez en el coche, y según indicó este testigo, Carcaño confesó la autoría del crimen y puso de manifiesto que "quería decir" desde dónde habían arrojado él y Samuel Benítez el cuerpo de Marta al río Guadalquivir. Tras ello, guió a los agentes al puente sobre el río e indicó el punto exacto donde hicieron desaparecer el cadáver, situado junto a la marca de un badén.

la víctima Francisco Javier García Marín, conocido como el Cuco y condenado por un delito de encubrimiento en relación al caso de Marta del Castillo, confesó a la Policía que, el día de los hechos, estuvo en el piso de León XIII donde se cometió el crimen y vio a la víctima "muy ensangrentada", según testificaron ayer tres agentes del Cuerpo Nacional de Policía durante la séptima jornada del juicio por la violación y el asesinato de la joven.

Los tres policías aseguraron que fue en un traslado realizado el 4 de marzo de 2009 desde el centro de menores de Jaén donde se encontraba, hasta Sevilla, cuando, tras conocer por boca de los agentes que se habían encontrado restos de ADN suyos mezclados con los de Marta en León XIII, el Cuco comenzó a llorar y, "espontáneamente", dijo que el día de los hechos se encontraba junto a Miguel en la habitación de éste, y que vio a Marta "en un charco de sangre".

"Empezó a llorar de forma que parecía que se le iba a salir el corazón del pecho", llegó a manifestar el que fuera jefe del Grupo de Homicidios en Sevilla. Asimismo, y según estos agentes, el Cuco reconoció que esa noche salió de la vivienda de León XIII y llamó al también acusado Samuel Benítez desde una cabina de teléfono ubicada en los alrededores, mientras que también puso de manifiesto que la víctima "no está en el río Guadalquivir".

de 'tele 5' a la fiscalía La Fiscalía de Sevilla pidió ayer al juzgado de Menores 3 que intervenga el dinero que habría cobrado la madre del Cuco, en una entrevista que concedió la pasada semana a Tele 5.

Según la Fiscalía, Rosalía García Marín, cobró unos 10.000 euros por la entrevista en el programa La noria. La Fiscalía requiere ahora esa cantidad de dinero, teniendo en cuenta que el Cuco y su familia deben 414.908 euros, dinero que el entonces menor fue condenado a pagar encubrir el crimen.