madrid. Los médicos prescribirán desde hoy la medicación a sus pacientes por principio activo, es decir, con el nombre de la molécula que contiene el fármaco en lugar de con la marca comercial. Además, los farmacéuticos tendrán la obligación de entregar a los pacientes el medicamento que sea más barato. Así, los doctores recetarán hoy ácido acetilsalicílico en lugar de aspirina, paracetamol en lugar de gelocatil o diazepam en lugar de valium.

Con esta nueva medida se tratará de ahorrar a las maltrechas cuentas del Sistema Nacional de Salud unos 2.000 millones de euros anuales, sin dañar la calidad de la prestación, al amparo de un decreto aprobado por el Gobierno para salvaguardar el actual modelo sanitario de la crisis económica. El facultativo podrá prescribir al paciente el que considere más apropiado siempre que exista "una necesidad terapéutica justificada", algo que hará constar en las recetas oficiales avalándolo con su firma, según ha aclarado el Ministerio de Sanidad. De forma también excepcional, podrá detallar la marca comercial siempre y cuando el fármaco esté a precio menor, lo que podría suponer un beneficio para la continuidad del tratamiento.

Por su parte, 8 de cada 10 médicos españoles consideran que esta nueva modalidad puede dar lugar a cambios reiterados en los medicamentos, originando "confusión, pérdidas de adherencia o duplicidades".