vitoria. Los pronósticos que apuntaban a la reelección de Josu Izaguirre como fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Álava acertaron de lleno. El fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, cumplió con las expectativas, recibió el informe favorable a la continuidad emitido por el Consejo Fiscal y confirmó ayer en el cargo al actual titular de la plaza, que la mantendrá durante cinco años más. Una vez conocida la noticia, Izaguirre manifestó su satisfacción por la confianza depositada y anunció que continuará avanzando por la misma senda que ha transitado en los cinco últimos años, periodo en el que se ha convertido en uno de los nombres de referencia de la actualidad judicial del territorio.
"Creo que la decisión del fiscal general del Estado avala la línea de trabajo que he seguido en los últimos años", interpretó el reelegido Izaguirre minutos después de conocer la resolución. Debido a ello, indicó que se mantendrá fiel a dicha línea y que seguirá aplicando la misma metodología que ha desplegado desde su llegada a Vitoria hace ya cinco años: "Trabajar, trabajar y trabajar".
Tres fiscales optaban en esta ocasión a la plaza. Su titular, el donostiarra Josu Izaguirre; el actual delegado de Seguridad Vial, Manuel Pedreira; y la responsable de la Fiscalía alavesa de Menores, Carmen Cotelo. El dictamen del Consejo Fiscal, favorable a la continuidad de Izaguirre, fue seguido al pie de la letra por Conde Pumpido pese a carecer de carácter vinculante. Nueve de los magistrados que componen este organismo manifestaron su apoyo a la reelección, uno votó por Carmen Cotelo y el último se abstuvo. El fiscal jefe del TSJPV, Juan Calparsoro, quien pugnó el año pasado con el propio Izaguirre para obtener su actual cargo, también le prestó públicamente su apoyo en esta ocasión.
El sí a la reelección de Conde Pumpido, quien cesará en el cargo al frente de la Fiscalía General del Estado en cuanto se nombre nuevo Gobierno, fue recibido sin sorpresas ayer en Vitoria. Su situación hacía previsible una despedida sin grandes cambios y finalmente se cumplieron las previsiones. En la misma sesión, el Pleno del Consejo Fiscal renovó a José Ramón Noreña al frente de la Fiscalía Antidroga, a Manuel Martín-Granizo como fiscal superior de Castilla y León, y a Jesús García Calderón como fiscal superior de Andalucía.
El donostiarra Josu Izaguirre tiene 47 años y antes de recalar en Álava desempeñó su cargo como fiscal jefe de Lugo entre 2001 y 2006. En su etapa gallega ya descolló en los medios al enfrentarse abiertamente a la Diputación lucense y promovió numerosas investigaciones contra altos cargos políticos y sus familiares más directos.
Su involucración en los casos de corrupción continuó en Vitoria. Prueba de ello es que en los últimos cinco años ha procesado a exconcejales, alcaldes y cargos de la Diputación alavesa en distintos frentes legales, algunos de ellos aún abiertos, como en el caso De Miguel. Al menos hasta 2016, Izaguirre conservará la misma tendencia.