vitoria. El trabajo policial en los últimos ocho meses parece haber dado sus frutos. Al menos, en su actuación contra los delitos más visibles, porque en general la tendencia dibuja un panorama similar al ya descrito en muchas ocasiones: los hurtos siguen incrementándose y, en ocasiones, de manera sonrojante. El caso es que los registros acumulados en la comisaría de la Policía Municipal detectan una progresión en la que los principales crímenes han descendido de enero a agosto de este ejercicio -cinco meses con una Guardia Urgana gestionada por el anterior Gobierno socialista y el resto, por el gabinete liderado por el actual primer edil Javier Maroto- de manera inexorable. En concreto, los robos y las tentativas de robo con fuerza en establecimientos, bares, empresas o camarotes han decrecido un 24%. Sin embargo, la cifra global dice que los hurtos siguen creciendo (los de bicicletas, un 24%; el resto, al ritmo del 4%).
Estos datos han sido extraídos de un estudio realizado por la Policía Local de la capital alavesa desde Año Nuevo hasta el 31 de agosto de 2011 en comparación a lo registrado en el mismo periodo de 2010. Según la misma memoria, también han disminuido en un 23% los robos y tentativas de robo en interior de vehículos y un 15% las sustracciones de turismos. Asimismo, la analista de la Guardia Urbana rebaja uno de los quebraderos de cabeza en la lucha contra la inseguridad ciudadana. No en vano, las estadísticas reflejan una tendencia a la baja en los robos en viviendas, en concreto, un 13%.
Ahora bien, no todos los datos son positivos, ya que los registros que dan fe del robo de bicicletas no han hecho otra cosa más que crecer. Y de manera desproporcionada. De hecho han subido un 24%. En ese sentido, el Gobierno municipal asegura que ya ha adoptado las primeras medidas con el fin de remediar esta situación. "Atajar los robos de bicicletas es una de las prioridades de la Policía Local", explicó ayer la actual concejal delegada del Departamento de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos, quien concretó su apuesta al respecto en un plan de acción específico diseñado para mitigar este tipo de crímenes.
Además, la gestora política de la Policía Municipal de Vitoria quiso mandar un mensaje de tranquilidad al asegurar que habrá más presencia policial en las calles y que tal circunstancia derivará en la merma de las cifras de criminalidad. "Sacamos a los agentes de los despachos a la calle", indicó para asegurar que el actual gabinete municipal ha aumentado la presencia de agentes en barrios como el Ensanche, Casco Viejo, Coronación, Salburua y Zabalgana.
Casos particulares Un joven de 21 años ha sido detenido por agredir "a manotazos" a los agentes de la Policía Municipal que le interceptaron cuando huía tras tener un problema con el vigilante de la OTA por una cuestión relacionada con el pago del estacionamiento. Los hechos ocurrieron el pasado martes cuando el encargado de la vigilancia de la zona azul tuvo problemas con el citado joven en la calle Cruz Blanca. Al parecer, el arrestado salió corriendo cuando llegaron los agentes, que lo interceptaron en Ramiro de Maeztu. Entonces, el joven se negó a identificarse y comenzó a agredir a los policías hasta el punto de herir de manera leve a uno de los agentes.
Por otra parte, la Guardia Urbana de la capital alavesa sorprendió a un menor de 14 años consumiendo marihuana a la salida de un colegio, por lo que fue identificado y denunciado. Los hechos fueron puestos en conocimiento de los padres del presunto infractor.