amurrio. El viñedo del txakoli alavés esta cumpliendo con las expectativas depositadas en él por sus cuidadores. No en vano, todo apunta a que este año se alcanzará un nuevo récord de producción, que situaría los registros en torno al medio millón de kilogramos de uva. Tal circunstancia supondría un aumento de casi un 13% en la cantidad cosechada hace un año y convertiría al actual ejercicio en el mejor de la historia del oro líquido del agro ayalés.
De hecho, el gerente de la Denominación de Origen Arabako Txakolina, José Antonio Merino, ha mostrado su satisfacción ya que "las inspecciones realizadas indican una muy buena situación de los viñedos, con buenísimos niveles de grado de azúcar, uva muy sana, granos gordos y racimos bien formados. Por todo ello, esperamos una vendimia de gran calidad. Intuimos unas previsiones ligeramente superiores a la campaña anterior, que podrían rondar los 500.000 kilos, si no se tuerce la climatología y continúa la favorable evolución que hemos vivido a lo largo del año".
En ese sentido, el desarrollo del año vitícola "nos ha deparado unas circunstancias que de cara a su valoración nos hacen prever unas circunstancias muy buenas de vendimia con una grandísima calidad y buenos niveles productivos", explicó Merino, antes de proceder a detallar la evolución experimentada en el viñedo desde la pasada vendimia y las causas de la buena situación de las vides. "El invierno con mucho frío dio paso a la poda que se desarrolló normalmente durante diciembre, enero y febrero. Mientras, la primavera tuvo niveles de lluvias muy bien proporcionadas que, aunque crearon algún problema de corrimientos no muy importantes y hubo problemas con la humedad, que obligó a mantener altos niveles de vigilancia, respetaron el desarrollo vegetativo muy bien apoyado por numerosos días de sol y, en general, se desarrolló de manera excepcional".
En estos momentos, el viñedo se encuentra en el periodo crítico de la maduración. Así, a estas alturas han previsto un adelanto de vendimia de aproximadamente doce días, con lo que la recolección del grano se podría producir entre finales de septiembre y primeros de octubre.