Vitoria. Las instalaciones de la Cruz Roja en el pantano de Ullibarri Ganboa han sufrido la ira de uno o varios atacantes. Según pudo conocer este diario de fuentes de la citada organización -que se encarga de la subcontrata de los servicios de socorrismo y emergencia en las playas del embalse-, distinto material médico y hasta cuatro embarcaciones amanecieron el pasado sábado con daños de diversa consideración, que bien podrían ser fruto de una acción de sabotaje predeterminada. Tras tener conocimiento de los hechos, estos fueron puestos en conocimiento de la Ertzaintza.
Al parecer, diferentes integrantes de la Cruz Roja se dirigieron el pasado sábado hasta las instalaciones del Club Náutico Aldayeta, donde están fondeadas las lanchas que se utilizan para realizar las labores de vigilancias propias del servicio de emergencias. Una vez allí, se percataron de que cuatro de las embarcaciones se encontraban pinchadas. Todas habían sufrido desperfectos de manera intencionada. En principio, cada una presentaba en su casco diversos boquetes, al parecer, realizados con un instrumento punzante o con el filo de una navaja.
Tras ponderar los daños, los responsables del citado departamento de socorro consiguieron poner en funcionamiento una de las lanchas. Con ella se desplazaron hasta el puesto de mando del servicio en la playa del pantano de Landa. Allí pudieron comprobar que sus embarcaciones no eran las únicas que habían sufrido daños. No en vano, la caseta utilizada para realizar las curas y para acoger a los socorristas había sido objeto del robo de diversos materiales.
En otro orden de cosas, la Policía Local de Vitoria informó ayer de varios hechos acaecidos durante el pasado fin de semana. Entre ellos, se encuentra un suceso del pasado viernes. Entonces, la Guardia Urbana imputó a un varón de 36 años por ser el presunto autor de un delito de violencia de género. Al parecer, su compañera sentimental fue la que avisó de la agresión sufrida ese mismo día en el domicilio familiar, en el barrio de Adurza. Explicó que ese tipo de comportamientos, con maltrato físico y psíquico, eran habituales. El hombre fue citado a comparecer ante la Justicia.
Además, a las 20.50 horas del sábado, los municipales procedieron a detener a una mujer, de 36 años, por agresión a su compañero sentimental en el domicilio familiar en la zona centro de la ciudad. Cuando acudieron los agentes al aviso de una fuerte discusión, pudieron comprobar la existencia de manchas de sangre en el acceso a la vivienda y que el hombre presentaba varios cortes en un brazo, que según sus manifestaciones habían sido ocasionados por la mujer, al ser agredido con una copa de cristal.
Por otra parte, a las 14.40 horas (también del sábado) se procedió a la detención de un hombre de 41 años. Al parecer, la acción de la Policía Local llegó tras ser requerida la presencia de varios agentes desde un centro asistencial.Allí estaba retenido un varón que había tratado de sustraer una cartera del bolso de una trabajadora en el vestuario. Al ser sorprendido por ésta, se produjo un forcejeo, que alertó a otros trabajadores, que pudieron inmovilizar al sospechoso.
Por último, a las 22.45 horas del sábado, la Policía Municipal detuvo a dos hombres, ambos de 19 años, tras recibirse la información telefónica de que se había producido un robo por el procedimiento del tirón en el barrio de San Martín.