vitoria. No hay mal que dure cien años. Tras tres días de un bochorno difícilmente soportable, el mercurio de los termómetros ha decidido dar hoy un respiro a los habitantes de estos pagos. Así, al menos, lo anuncian los escenarios que manejan los responsables de la Agencia vasca de Meteorología, Euskalmet. Sus previsiones pronostican una bajada de las temperaturas que servirán para refrescar un ambiente muy caldeado por las últimas jornadas de calor sahariano. En principio, el descenso previsto contempla una rebaja térmica de alrededor de cinco grados.
De esa forma, las temperaturas podrían situarse entre los 20 y 25 grados centígrados en el litoral vasco y los 30 y los 32 en las zonas de interior, valores todos ellos más acordes con las actuales fechas veraniegas. Todo ello será posible, según Euskalmet, al predominio de vientos de componente norte en superficie que favorecerá la llegada de una masa de aire de origen atlántico con valores bastante más suaves que los padecidos durante el pasado fin de semana.
El caso es que en esos días, se produjo un episodio de temperaturas altas extremas y persistentes que afectó especialmente al País Vasco. Esta situación provocó la entrada de una masa de aire cálido de origen sahariano. Esas corrientes cálidas, junto con el viento del sur, hizo que el calor fuera muy intenso, destacando especialmente los valores alcanzados en la vertiente cantábrica. Este episodio de temperaturas altas persistentes y máximas extremas concluyó el domingo, ya que ayer las temperaturas máximas se situaron entre los 25 y 30 grados centígrados en el litoral y entre los 30 y 32 en Álava. En opinión de Euskalmet, durante el sábado las máximas se registraron en las comarcas del Alto Deba y del Goierri (Oñate 39,4 grados, Estanda 39,5, Alegia 39,2 y en los Valles Alaveses (Subijana y Zambrana vivieron 38,9 grados).
En la costa, sin embargo, la brisa no permitió el aumento desmesurado de las temperaturas. De hecho, en la costa vizcaína no se superaron los 30 grados. En la guipuzcoana se registraron máximas de 33. Sin embargo, la situación cambió radicalmente el día 21 con la entrada del viento sur hasta el litoral.
A partir de ahí, fueron numerosas las estaciones que sobrepasaron los 39 grados (Zarautz 39,6, Miramón 39,4, Oleta 39,6, Llodio 39,8, Arrasate e Ibai Eder 39,3). Además, durante el citado episodio se experimentaron noches tropicales al no bajar el termómetro de los 20 grados. El fenómeno sucedió sobretodo en la costa, pero también en puntos tan dispares como Orduña o Páganos.
Con todo, este episodio no ha sido el más caluroso del verano. El calor fue aún más intenso durante los días 26 y 27 de junio. De hecho, el 26 resultó ser el día más caluroso del verano en la CAV y batió el récord, además, para un mes de junio en lo que llevamos de siglo. Los valores más altos de este episodio de junio se registraron en puntos de la cantábrica interior (Llodio 41,6 grados, Balmaseda 41,5 y Altzola 41,2).
De manera local, dicha afirmación no se cumple para todo el territorio. Así, en las zonas concretas de la mitad este de Álava y al norte de las comarcas del Alto Deba y Goierri las temperaturas alcanzadas el pasado día 20 de agosto fueron más altas que las registradas en junio, por lo que dicha jornada ha resultado ser, de momento, el día más caluroso del verano. En ambas zonas hay que remontarse al excepcional verano de 2003 para encontrar valores superiores.
Sea como fuere, las altas temperaturas de los últimos días apenas si han hecho mella en las reservas de aguas en el sistema hídrico provincial. Los embalses de Albina, Ullibarri Ganboa y Urrunaga, todos ellos correspondientes a la cuenca hidrográfica del río Ebro, se encuentran a más del 70% de su capacidad. El primero de ellos, con una capacidad de cinco hectómetros cúbicos, se encuentra al 80%, lo que implica un ascenso notable con respecto a la misma época del año pasado. Por aquel entonces, contaba con un vaso al 60%.
No ocurre lo mismo con Ullibarri y Urrunaga, ya que ambos han experimentado un ligero descenso en el agua almacenada. El primero (con una capacidad de 146 hectómetros cúbicos), contaba con un 77% de su total cubierto en 2010, mientras que en la actualidad se encuentra al 72,6% de su capacidad. Urrunaga, por su parte, tiene una capacidad de 72 hectómetros cúbicos. A día de hoy esa reserva supone el 70,8%, cuando hace un año estaba al 75%.