vitoria. El que la sigue la consigue. Los criadores de la decena de razas de ganado bovino que quedaban fuera del label según un mandato europeo han encontrado una solución para subsistir. Y es que, la Comisión Europea dictaminó el pasado 29 de marzo que no se podrán incluir en la denominación Euskal Okela animales que no pertenezcan a las razas tradicionalmente criadas en Euskadi. Un mandato, por el que sólo se consideran como tales la pirenaica, limusin, pardo alpina, blonda y terreña, y que dejaba fuera a una alta producción de Euskadi.

Pero el sector ganadero unió fuerzas para evitar que muchas explotaciones se vieran obligadas a cerrar y tras varias reuniones con los responsables de Euskal Okela y el Gobierno Vasco parece haberse encontrado una vía de escape.

Así las cosas, el ejecutivo autonómico vasco ha estudiado la situación y ha habilitado una nueva marca que, aunque no contará con el Indicador Geográfico Protegido (IGP), permitirá recibir las subvenciones de igual manera. Este sello estará auspiciado bajo el Eusko label pero no pertenecerá a Euskal Okela, que será la que mantendrá las cinco razas reconocidas por Europa -pirenaica, limusin, pardo alpina, blonda y terreña-.

Así las cosas, la decena de razas apartadas -como la txarolesa, asturiana, flewick, gascoigne o saliers, entre otras- se comercializarán ahora bajo el nombre Baserriko Haragia, lo que permitirá que alrededor de 1.600 animales, que por raza o edad perdían el label en base a las exigencias de la normativa europea, cuenten de nuevo con unas condiciones similares a las del resto.

Y es que abandonar la denominación de origen suponía para los ganaderos de estas razas una pérdida importante de dinero en la comercialización, ya que la venta caería en torno a 300 euros por animal. Por otro lado, desarrollar una Indicación Geográfica Protegida Propia (IGP) les supondría no optar a las ayudas europeas de 22 euros que recibía hasta la fecha y quedarse sólo con los 38 euros de los fondos del Gobierno Vasco.

tras el verano Esta alternativa se pondrá en marcha después del verano ya que el dictamen europeo entrara en vigor también en esas fechas. Así, al menos, lo esperan los ganaderos que se encuentran satisfechos con la solución encontrada por lo que han descartado ya hacer efectiva la opción que tenían hasta septiembre de recurrir la resolución europea. "Estamos contentos con esta nueva marca. El sector está de acuerdo y esperamos que esto no cambie.

Aunque todavía no sabemos exactamente cuándo se pondrá en marcha, esperamos que sea para después de verano, según el plazo de la normativa. De esta forma, queda solventada la injusticia que nos parecía que se había cometido", afirma el presidente de criadores de ganado txaroles de Álava y Euskadi, Joseba Ibarrola.