vitoria. La autoridad ya no lo es tanto. Y si no, que se lo pregunten a los agentes de la Policía Municipal de la capital alavesa que durante este fin de semana han tenido que lidiar hasta con cuatro casos de agresiones hacia sus personas. La profusión de delitos, faltas y sucesos cada vez más violentos han propiciado que las actuaciones policiales sufran en la misma proporción las consecuencias de la nueva realidad social impuesta por el crecimiento poblacional y por el incremento de delitos que se registra en la ciudad en los últimos años, según avanza la Fiscalía en su Memoria correspondiente a 2010.

Sea como fuere, lo cierto es que las patrullas de la Guardia Urbana han tenido trabajo a destajo durante los últimos días. Así, por ejemplo, el pasado viernes, a las 16.45 horas, varios agentes detuvieron a un joven de 21 años en la calle Beato Tomás de Zumárraga acusado de un presunto delito de agresión, resistencia a agentes de la autoridad y daños a un vehículo. Al parecer, la Policía Municipal fue avisada de que en la citada calle un individuo intentaba abrir un vehículo particular utilizando para ello un destornillador. Al acercarse al lugar, observaron al joven junto a un coche. Decía que el turismo era suyo mientras se dirigía a la patrulla de malas formas. Al pedirle que se identificara, el joven insultó e intentó agredir a uno de los agentes antes de ser reducido.

Otro caso de desobediencia y resistencia a los agentes ocurrió a las 21.03 horas, también del pasado viernes. Entonces, una patrulla tuvo que arrestar a un hombre de 45 años en la calle San Antonio. le acusaron de ser el presunto autor de varios delitos de agresión, resistencia a la autoridad y daños a vehículo policial. Momentos antes, el agente de custodia de instalaciones del Departamento de Bienestar Social tuvo que intervenir con un varón que, en actitud muy agresiva, iba dando patadas, puñetazos y portazos a las puertas del interior de dichas dependencias. Al salir a la calle, el varón prosiguió en su conducta, tirando una moto policial al suelo. Al ser recriminado por el agente, la persona intentó agredir al mismo. Tuvo que ser reducido debido a la conducta violenta y agresiva que presentaba.

Ya el sábado, más de lo mismo. A las 18.12 agentes de la Guardia Urbana detuvieron a un joven de 25 años en la calle Iturritxu. Tras el preceptivo aviso en Aguirrelanda de la presencia del sospechoso causando daños a vehículos particulares, los agentes procedieron a la detención del citado, que les esperaba a la altura de la calle Adurza con el torso desnudo e impidiendo la circulación de vehículos. El joven comenzó a insultar y a amenazar a los agentes, mostrando resistencia. Dado que no cesaba en su conducta y que estaba muy violento, se procedió a su detención, teniendo que hacerse uso de la fuerza necesaria para reducirlo.

Sucesos como los citados se reiteraron el domingo. A las 6.30 horas, en la calle Bastiturri fue detenido un joven de 23 años acusado de desobediencia y resistencia a la autoridad. Al parecer, varios policías tuvieron que intervenir con un varón que les manifestó que momentos antes había sido agredido por un grupo de siete personas y que le habían robado la cartera. Les manifestó igualmente, que la Ertzaintza no había querido atenderle, dirigiéndose a los miembros de dicho cuerpo con fuertes insultos. Al ser recriminado por la patrulla por su conducta, el arrestado dio una patada a la puerta del coche patrulla. Asimismo, intentó agredir a uno de los agentes.

Con anterioridad, el sábado, los municipales arrestaron a las 10.09 horas a un joven de 21 años en el paseo de la Universidad por un presunto delito de robo con violencia, por el método del tirón.