MANILA. Un humilde carpintero filipino que no ha podido escolarizar a sus seis hijos por falta de recursos económicos es ahora multimillonario tras ganar el segundo mayor premio de la historia en la lotería nacional, indicaron hoy fuentes oficiales.
La Administración Filipina de Loterías (PCSO) señaló que el agraciado, de 60 años que también trabaja de vigilante en un suburbio de Manila, ya ha recogido su premio de 356 millones de pesos (8,27 millones de dólares ó 5,69 millones de euros).
El portavoz de la PCSO, Joseph Muego, aseguró que el nuevo millonario y su familia abandonaron de inmediato el deprimido barrio de chabolas en el que llevaban años viviendo.
"Han regresado a su provincia por razones de seguridad. Es bueno que hayan seguido el consejo que les dimos por su propio bien", explicó.
Muego añadió que el ganador, quien eligió una combinación de números basada en su aniversario de bodas y los cumpleaños de sus hijos, va a invertir parte del dinero en comprar una casa y una parcela de tierra para su familia.
"También quiere enviar a sus hijos a la escuela. Me contó que como no terminó su educación básica ni siquiera sabe calcular todo el dinero que ha ganado", indicó.
Millones de personas forman interminables colas en los puestos de lotería cada vez que se sortea un premio especial en Filipinas, donde más del 25 por ciento de la población vive por debajo del nivel de la pobreza.