MADRID. Este informe se basa en datos de Alemania, Argentina, Australia, Bélgica, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Corea del Sur, Egipto, España, Francia, Gran Bretaña, Grecia, Holanda, Italia, Japón, Malasia, México, Nigeria, Nueva Zelanda, Pakistán, Polonia, Rumanía, Sudáfrica, Suiza y Turquía. Según explica el socio senior de Deloitte en Gran Bretaña Lawrence Hutter, "este análisis no identificó ninguna relación directa estadísticamente significativa entre la regulación que afecta al empaquetado de productos de tabaco --incluyendo el tipo y tamaño de las advertencias sanitarias-- y cambios en el consumo de tabaco legal".
Este documento pone en entredicho la efectividad de las legislaciones sobre empaquetado y sugiere que los gobiernos deberían considerar los eventuales efectos que tendría introducir un empaquetado estándar sin logotipos o marcas. Según este estudio, prohibir el uso de logotipos de marcas en los empaquetados podría incrementar el mercado ilegal y ocasionaría pérdida de ingresos al Estado.
Según el gerente Internacional de Asuntos Regulatorios de British American Tobacco, Bede Fennell, "cuanto más se homogeneicen los empaquetados, más fácil será falsificarlos". "El mercado negro perjudica a los expendedores de tabaco legítimos y no tiene en cuenta aspectos como la comprobación de la mayoría de edad en la venta, de modo que una iniciativa inicialmente pensada para mitigar el consumo de los menores podría acabar teniendo el efecto contrario", concluye.