Bilbao. Las familias de los 90.000 escolares que comen a diario en los jantokis tienen todas sus esperanzas depositadas en la reunión que esta tarde reunirá a las partes enfrentadas y, al parecer, también al Gobierno Vasco, que durante los dos últimos cursos se ha negado a mediar para poner fin a este conflicto. No son pocas las voces que piden un arbitraje y no entienden por qué el Gobierno Vasco no ha adoptado aún esta medida a la vista de que no se ha producido ningún avance, como aseguran los sindicatos.

La versión sindical fue desmentida ayer por la patronal, que defendió que su voluntad de negociar se ha traducido en la puesta en marcha de un conjunto de medidas de mejora de las condiciones económicas y profesionales de los trabajadores. Según las mismas fuentes, se ha procedido a aplicar un incremento salarial a cuenta del 2%, que se recoge en las nóminas desde enero. De igual forma, aseguran, las empresas han atendido las reivindicaciones sindicales en materia de incremento del tiempo de trabajo de las personas que cuidan los comedores escolares (monitoras), que han aumentado en 18 horas por curso escolar. Este tiempo de trabajo complementario se ha puesto en marcha en el 99% de los centros escolares de la red pública. "Este hecho se ha traducido en la consiguiente mejora de las percepciones económicas de quienes realizan ese trabajo. Las empresas abonan las cantidades correspondientes desde el primer momento", afirma la patronal.

Otra de las reivindicaciones que las empresas habría puesto en marcha es la implantación de un plan de formación, en el que está prevista la participación de cerca de 5.000 personas.