Vitoria. El malestar de los vecinos de la zona rural alavesa por las exageradas facturas que están teniendo que pagar a cambio de calentar sus casas sigue creciendo. Los afectados no sólo han vuelto a recibir una nueva remesa de recibos que triplican las cantidades que han tenido que abonar hasta el momento, sino que las reclamaciones que han presentado ante el Gobierno Vasco han sido rechazadas.

¿La razón? Al parecer, la plantilla de denuncia que ha elaborado el servicio jurídico de la Diputación Foral de Álava y que ha repartido entre los afectados no es válida, ya que entre otras cosas contiene errores de identificación, puesto que no incluye el DNI del denunciante, tan sólo el número de cliente de Repsol. Por este motivo, Consumo ya ha advertido a quienes han pasado por esta oficina que sus reclamaciones no van a ser tenidas en cuenta.

Esta actitud ha vuelto a encarar al Ejecutivo vasco y a la Diputación alavesa. Esta última exige al área de Consumo que "ejerza su competencia" y que "no se escude en tecnicismos" para tratar de esclarecer unos hechos que afectan aproximadamente a más de 15.000 personas de distintos pueblos del territorio. El Gobierno foral asegura "no entender" el motivo por el que a Lakua no le valen las copias de reclamaciones enviadas ya por los particulares a la compañía que les suministra gas propano, por lo que le pide que "intervenga y actúe".

El diputado foral de Administración Local, Iñaki Nafarrate, asegura que no es su intención entrar en "guerras institucionales", pero le recuerda al Ejecutivo autonómico que es a quien compete usar la fuerza de las reclamaciones ciudadanas para intentar resolver esta situación. Cabe recordar que hace poco el Gobierno Vasco le reprochaba también a la Diputación estar creando "alarma social" con el caso de las facturas de gas.

Entre tanto, los afectados siguen movilizándose para tratar de saber el motivo por el que están pagando una media de 900 euros por calentar sus casas. Repsol insiste en que el aumento se debe al precio del gas, que ha experimentado un encarecimiento cercano al 28%, y también a un mayor consumo. Sin embargo, los clientes aseguran que no han hecho mayor uso de la calefacción que en otros inviernos, ya que se ha registrado una temperatura media de dos grados superior al año pasado, según los datos registrados por la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet.

Labastida ha sido la primera localidad alavesa en recibir una nueva factura, la correspondiente a los meses de febrero y marzo, y el susto ha sido importante. Prácticamente se repiten las cifras de la lectura anterior, pese a que han cuidado mucho el consumo.