Vitoria. La casualidad quiso hacer un guiño a la República en La Puebla de Arganzón. En un requiebro de la Historia digno del mejor relato, una alegoría de la legalidad republicana logró sobrevivir en la villa incluso a las peores épocas del franquismo más rancio y reaccionario. Y lo que es mejor. Lo hizo pavoneándose delante de quienes bendijeron la llegada de la dictadura tras una confrontación fatricida. Ahora toca celebrar semejante osadía.
Nada más llegar la II República, la localidad del enclave trebiñés, como tantas otras, acordó en un Pleno de su remozado Ayuntamiento -las elecciones municipales fueron el 12 de abril y sus resultados determinaron el fin de la monarquía- cambiar el nombre de su plaza principal para regocijo democrático. Los munícipes elegidos en los comicios de 1931 se reunieron el 19 de julio de aquel año para adoptar las primeras medidas de índole consistorial. Entre ellas, los ediles acordaron modificar la nomenclatura de su callejero para adaptarse a la realidad. Las actas de aquel entonces recogen un "también se acuerda el cambiar el nombre de la plaza Alfonso XIII por el de plaza 14 de abril" -en conmemoración de la fecha en la que se estableció la II República-. Dicho y hecho. La rotulación de las calles habilitó una placa en una de las nobles paredes del foro con el nuevo nombre del espacio público.
Al igual que le ocurrió a la democracia, la placa desapareció de escena. Pero al contrario que a la República, que murió a manos del fascismo, el distintivo logró sobrevivir por aquello del azar, de la suerte o de la providencia divina. Al parecer, el destino quiso ocultar el recuerdo al 14 de abril tras los materiales que se emplearon en la restauración de la fachada de la casona en la que se encontraba el letrero. Según explican desde el pueblo, la placa volvió a parecer de manera accidental hace no muchos años. Se restauró y aún hoy sigue esbelta en su sitio como lo ha estado durante las últimas décadas.
Por ello, precisamente, un grupo de republicanos ha pensado en celebrar en la misma plaza el aniversario del 14 de abril. Según indican, su intención es hacerlo de manera alegre y participativa a través de una inciativa que parte bajo los auspicios del primer Botellón republicano del que se tiene constancia.
La fiesta será sencilla y emotiva. Habrá música de la época, con los mejores éxitos que atronaban en los cafetines de los años 30 del pasado siglo. También se habilitarán paneles de recuerdo y homenaje a los republicanos de la localidad y libros para que los visitantes puedan firmar su presencia en el evento.
Los organizadores pondrán mesas para recibir la comida y la bebida de los participantes, que deberán colaborar "como buenos republicanos, listos a departir y compartir" a partir de las 19.00 horas en el rincón marcado por la historia. Todo aquél que aparezca por la localidad con una escarapela tricolor, con una bandera, con una antigua partitura... Será bienvenido al grito de "salud y República". Invitados quedan.