Algunos llevaban semanas preparándose para este gran día, y tanto esfuerzo mereció la pena. Aunque todavía faltan algunas horas para que la Korrika entre en Vitoria, los escolares empezaron ya ayer a calentar motores, aportando así su granito de arena para que en esta ciudad se pueda seguir hablando y practicando euskera cada vez con mayor frecuencia.

Más de 2.000 personas tomaron las calles de la capital alavesa en una iniciativa que discurre paralela a la gran marcha que arrancó el pasado día 7 desde Trebiño y que finalizará el domingo en San Sebastián con una gran fiesta. La Korrika Txikia es una iniciativa en la que participan un total de 24 centros escolares de la ciudad, que también se quieren dejar ver y escuchar en la calle.

El acto, con el que colabora la coordinadora AEK, partió a primera hora de la tarde desde Portal de Castilla y recorrió a lo largo de diez kilómetros el pueblo de Armentia y parte de los barrios de Vitoria, como Ariznabarra, San Martín, Lakua, Txagorritxu y Zaramaga. La carrera tuvo su meta en la Plaza Nueva. Una vez allí, los alumnos de Infantil y Primaria leyeron un mensaje de ánimo para seguir amando y aprendiendo la lengua vasca, tal y como reza el lema elegido este año para la Korrika: Maitatu, ikasi, ari... Euskalakari". En este particular encuentro entre escolares, la ikastola Odon de Apraiz ha tenido un protagonismo especial, ya que acaba de cumplir 25 años. Por ello, y como novedad, los alumnos de dos años participaron en la etapa, entre el tramo de la plaza Bilbao y la calle Obispo Ballester, en el que la ikastola llevó el testigo.

Mientras tanto, el pelotón del euskera continuó ayer haciendo camino en tierras vasco-francesas. A mediodía arribó a Donibane Garazi, desde donde partió otra vez rumbo a Irun. Hoy, por su parte, el testigo atravesará el territorio guipuzcoano y parte del vizcaíno, ya que llegará hasta Markina-Xemein.

En Vitoria, por su parte, todo está listo para recibir a la Korrika. La capital alavesa guarda un buen recuerdo de la edición anterior, celebrada hace dos años, en la que la cuidad fue elegida por la organización para acoger la fiesta de clausura. En esta ocasión, el testigo no hará paradas, pero a su marcha dejará a buen seguro un ambiente inmejorable en sus calles.

Los primeros corredores harán su entrada mañana a las 18.00 horas y atravesarán las entrañas de la ciudad hasta salir de nuevo hacia Bilbao, adonde llegará a última hora de la tarde. La carrera a favor del euskera hará sus últimos kilómetros en Donostia. Allí llegará a las 9.30 horas y sobre las 13.30 horas se calcula que arranque el acto de clausura. En total serán más de 2.000 kilómetros los que recorrerá el testigo en esta decimoséptima edición de la Korrika.

homenaje Este año, la organización ha decidido homenajear a la academia de la lengua vasca, Euskaltzaindia. Cabe recordar que la propia coordinadora AEK nació al amparo de esta institución y que, desde la carta que escribió Rikardo Arregi en 1966 pidiendo la creación de grupos de alfabetización, han sido numerosos los académicos que han destacado en la euskaldunización de adultos.