Vitoria. Empezaron siendo muy pocos, tan sólo ocho, aunque ya suman cerca de 40 el total de niños que han experimentado gracias a las escuelas infantiles Kimba con el método Suzuki, desarrollada hace más de cuatro décadas por el violinista japonés con el fin de fomentar la atención, la creatividad y la memoria entre los pequeños. Los alumnos de la guardería, todos ellos con edades comprendidas entre los dos y los seis años, ofrecieron ayer un recital de violín en el salón de actos de Marianistas, demostrando todo lo que han aprendido a lo largo de este tiempo.
Por primera vez, los padres abandonaron su papel protagonista para disfrutar del concierto desde la zona de butacas. Y es que, tal y como recuerda la directora de Kimba, María Campo, las familias tienen también una importante responsabilidad en el desarrollo de este método, ya que deben aprender nociones básicas para tocar el instrumento con el fin de continuar en casa el trabajo iniciado con el profesor . "En ello está parte del éxito, en que los padres, en lugar de dejar a su hijo en clase y marcharse a hacer otras cosas, se quedan y se implican directamente", asegura.
La escuela infantil Kimba es el único centro autorizado en Álava para impartir el método Suzuki, muy reconocido en todo el mundo. De hecho, distintos estudios han demostrado que quienes reciben una educación musical desde pequeños desarrollan una mayor habilidad en otras competencias con la lengua o las matemáticas.
Además, el curso que viene los pequeños podrán empezar a formarse también musicalmente a través de la pedagogía Willems.
