madrid. El primer día de aplicación del nuevo límite de velocidad de 110 kilómetros por hora en autopistas y autovías, que entró en vigor a las 6.00 horas del lunes, concluyó sin ninguna víctima mortal, un hecho que sólo ocurrió en cuatro ocasiones en todo el año pasado. El primer fallecimiento se produjo 35 horas después que la medida entrara en vigor.

Así lo comunicaron fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT), que subrayaron que la reducción de la velocidad no tuvo ninguna incidencia en el tráfico rodado, si bien no precisaron datos de velocidad media en las carreteras o del número de infracciones cometidas al tratarse de una sola jornada, que no son significativas desde el punto de vista estadístico. Además, fuentes de la DGT insistieron en que no tienen en cuenta las vías urbanas.

De esta forma, aunque los lunes son el día de la semana por la mayor probabilidad de sufrir un accidente, superando a los viernes según el último estudio de la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA), las primeras 24 horas de aplicación de la rebaja de la velocidad máxima cerraron sin accidentes mortales en las carreteras.

No obstante, a las 11.00 horas de ayer una joven de 26 años falleció después de que el turismo que conducía se saliera de la vía y cayera al vacío por un desnivel en un puente a la altura del kilómetro 8 de la carretera de Sierra Nevada A-395, en el término municipal de Cenes de la Vega (Granada).

Durante el año 2010, la media de fallecidos en accidente de tráfico fue de alrededor de cinco muertos al día, por lo que este tipo de jornadas sin víctimas no son muy comunes.

Sin embargo, 2011 está siendo un año especialmente bueno en este sentido, ya que durante el mes de enero hubo tres días en los que no se registraron víctimas mortales.

El dato de las primeras 24 horas de aplicación de la reducción de la velocidad máxima en vías rápidas es alentador, ya que se espera que los muertos por accidente de tráfico se reduzcan alrededor de un 10% al año según las estimaciones de un informe de la Asociación de Ingenieros de Tráfico (AIT) sobre el nuevo límite de velocidad.

Así, la AIT señala que "resulta evidente que la reducción de velocidad media va a traer una mejora de los datos de seguridad vial", ya que, a menor velocidad, se dispone de más tiempo para reaccionar ante cualquier incidente y la gravedad del accidente es menor.

En este sentido, estima que, a falta de estudios más detallados, si la velocidad media se rebaja en 10 km/h, la reducción anual del número de muertos por esta causa puede estar alrededor del 10%, hasta 40 fallecidos menos de los 399 en 2010 en autovías y autopistas. Igualmente, cifra en un 10% la reducción de heridos graves.

Asimismo, la asociación señala que "inicialmente podrían producirse algunos accidentes" por ser el límite "más bajo del que el conductor está acostumbrado", pero "a medio plazo" estos accidentes, que representarían una cifra poco significativa, "desaparecerán".

Respecto a la "confortabilidad" de la conducción a 110 km/h, AIT indica que la reducción de la velocidad también producirá velocidades de circulación más homogéneas, de manera que la conducción será más cómoda.