madrid. La Guardia Civil se incautó en 2010 de más de 310 toneladas de estupefacientes, principalmente cannabis y cocaína, y detuvo a 9.000 personas por narcotráfico, además de denunciar a otras 139.484 por tenencia de drogas para el consumo, según el balance del Servicio Fiscal del instituto armado.
En las 8.011 intervenciones por tráfico de drogas practicadas por la Guardia Civil el año pasado, el cannabis fue la sustancia que más se aprehendió, ya que fueron decomisados 272.595 kilogramos de hachís, 24,6 toneladas de plantas de marihuana y 1.565 kilos de esta droga ya procesada.
La cocaína aparece en segundo lugar con 12.051 kilos intervenidos, a los que hay que añadir crack y otros derivados.
En cuanto a los detenidos, la mayor parte son españoles (5.400), seguidos de marroquíes (1.460), y colombianos (468).
El balance del Servicio Fiscal de la Guardia Civil recoge también las actuaciones en materia de delitos contra la propiedad intelectual e industrial.
Así, en lo referente a la falsificación de marcas, que constituye un delito contra la propiedad industrial, la Guardia Civil intervino diversos efectos de confección, calzado o relojería por un valor cercano a los 45 millones de euros, en las cerca de 535 intervenciones realizadas en España, que se saldaron con la inculpación de 593 personas.
En la lucha contra el contrabando de tabaco, la Guardia Civil aprehendió ocho millones de cajetillas de cigarrillos y más de 38.000 puros en las 1.513 intervenciones practicadas, en las que fueron detenidas 73 personas y otras 1.442 imputadas. Otras infracciones denunciadas por las diferentes unidades del Servicio Fiscal de la Guardia Civil son las detectadas en materia de impuestos especiales y del control de cambios. Así, en materia de fraude de impuestos se procedió a la incautación de 108.152 litros de alcohol y bebidas derivadas por un valor superior a los 318.000 euros en 126 intervenciones practicadas en las que fueron inculpadas 121 personas.