DONOSTIA. La misma fuente ha precisado que los hechos sucedieron ayer, sobre las cinco de la tarde, cuando una dotación policial observó a dos jóvenes en actitud nerviosa y vigilante ante un establecimiento de Beasain, que se encontraba cerrado.
Los sospechosos accedieron al comercio en el momento en el que abrió sus puertas e intentaron vender las dos pulseras de oro.
Los ertzainas identificaron a los jóvenes, de 18 y 30 años, y averiguaron que tanto las pulseras como un teléfono móvil que llevaban procedían de un robo perpetrado esa misma mañana en el interior de un turismo aparcado en la localidad de Urnieta.
Los presuntos ladrones, ambos con antecedentes por delitos contra la propiedad, fueron detenidos.