BILBAO. El consejero vasco de Sanidad, Rafael Bengoa, ha acusado hoy a la industria tabaquera de potenciar debates en contra de la prohibición de fumar para "torpedear la legislación" y ha recordado que los cigarrillos incorporan sesenta componentes cancerígenos.
"No voy a caer en la trampa de esa industria, que busca desviar la atención y manipular a los países que aprueban leyes contra el tabaco", ha dicho en una conferencia de prensa en Bilbao, en la que también ha recordado que se está legislando "sobre algo que es dañino para la salud".
Bengoa se ha referido así a la polémica surgida ayer en el País Vasco tras conocerse que no se podrá fumar en los "txokos" o sociedades gastronómicas que estén registrados según la ley de asociaciones o bien que tengan personal empleado.
El consejero ha rehusado referirse al debate sobre la conveniencia de prohibir fumar en los "txokos" porque, según ha indicado, no quiere "caer en la trampa" de la industria del tabaco y ha puntualizado que estas sociedades son espacios cerrados y que el "humo pasivo" también está considerado cancerígeno.
"Lo que me choca -según ha destacado- es que los que ponen el grito en el cielo por esta prohibición no digan nada en contra de una industria que manipula y utiliza técnicas subversivas para conseguir que las personas sientan que fumar no es nocivo".
El titular de Sanidad ha contestado con un "veremos" al ser preguntado si se inspeccionarán los "txokos" para verificar que se mantiene la prohibición y ha opinado que, al final, esas asociaciones "se regularán igual que lo ha hecho la sociedad".