vitoria. La Asociación de Personas con Discapacidad Física de Álava, Eginaren Eginez, y la Asociación de Autismo, Arazoak, solicitaron ayer al Ayuntamiento implicación para poder mudarse de los locales donde actualmente desarrollan su actividad a otros que reúnan unas condiciones dignas. El turno popular fue el cauce elegido por ambos colectivos para lanzar esta reivindicación que viene de lejos. Para los primeros, los problemas de espacio y de accesibilidad son los principales impedimentos, porque cabe recordar que gran parte de los usuarios de los locales viven sobre una silla de ruedas. Para los segundos, las estrecheces, la falta de agua caliente o de un baño propio surgen como las principales complicaciones. Peio López de Munain, edil de servicios sociales, recordó a los colectivos que deben contar con una vía de financiación para adecuar los locales que pueda cederles el propio Ayuntamiento. La Diputación, mediante convocatoria, colabora económicamente con dos asociaciones al año.
