Vitoria. "Las ikastolas de Euskadi han tocado techo en su capacidad para admitir más alumnado. Con enorme tristeza, nos vemos obligados a decir que no a muchas familias que acuden a nuestras oficinas". Las palabras del presidente de Ikastolen Elkartea, Koldo Tellitu, suenan claras, y quizá las pueda expresar más altas, pero no con más rotundidad. Estos centros de enseñanza en euskera de la CAV carecen de capacidad para atender toda la demanda de familias que acuden a sus oficinas para tratar de apuntar a sus hijos en estas aulas, según expresó ayer Tellitu en la presentación de la campaña de prematriculaciones que en Euskadi comienza el 31 de enero y finaliza el 11 de febrero (el periodo para registrar a los niños en estos colegios de Navarra se iniciará el 7 de febrero y se desarrollará durante esa semana).
Tellitu reclama que el Gobierno Vasco aporte más finaciación a las ikastolas para poder hacer frente a todas las peticiones de alumnos, y poder rebasar así el número de 40.000 escolares que actualmente cursan sus estudios en los centros de Álava, Gipuzkoa y Bizkaia, agrupados en Ikastolen Elkartea. "Nuestro objetivo es admitir a todos. Necesitaríamos que nos concertasen más aulas y crear más instalaciones y mejorar las existentes, para lo cual necesitaríamos más financiación, como centros sostenidos con fondos públicos que somos", reseñó el portavoz de esta asociación.
Tellitu reconoció que se sienten "preocupados por este criterio de la Administración, que coarta la libertad de elección de centro de las familias y distorsiona una tendencia social y natural hacia las ikastolas".
El máximo representante de estos colegios remarcó que resulta "imprescindible la financiación pública porque la falta de recursos incide en el derecho a elegir de las familias". "Por desgracia, en las ikastolas todavía tenemos que decir que no. Esa limitación viene directamente de la administración. Esperemos que se le pueda dar la vuelta a la situación para afrontar los retos". Tellitu matizó que esta necesidad de recursos económicos no es óbice para que las relaciones con el Ejecutivo vasco sean fluidas. "La relación es cordial y correcta, pero algunos elementos siguen resbalando", describió el presidente de Ikastolen Elkartea.
La crisis no pasa desapercibida para los responsables de esta asociación, quienes son conscientes de que el contexto económico en poco ayuda a sus peticiones. No obstante, aclara que el asunto de la financiación pública "viene de lejos", anclado en anteriores legislaturas.
Tellitu también incidió en "la "incertidumbre que afecta al conjunto del país, aunque sea de manera asimétrica, en relación con los debates al tratamiento del plurilingüismo, los modelos lingüísticos, el currículo vasco, el material escolar, la educación en relación con las competencias y otros aspectos".
Frente a esta circunstancia, señaló que las ikastolas representan "solvencia y excelencia, demostradas durante largos años de andadura". El presidente de esta red de centros quiso transmitir "confianza a las familias en un momento en el que se respira cierta incertidumbre en el ámbito educativo".