El retén de Bomberos de Aguirrelanda se tuvo que emplear a fondo el pasado domingo para tratar de contrarrestar un desprendimiento en la fachada de un bloque de pisos de la calle Landaberde. La intervención llegó a las 14.53 horas -se prolongó una hora- cuando el vecindario se dio cuenta del desprendimiento de varios alféizares de las ventanas de los números 5 y 7. Al parecer, la porosidad de los materiales facilitó que se oxidara una varilla interna, provocando el destrozo.