Vitoria. Las personas que perciban la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) y que pidan Ayudas de Emergencia Social (AES) tendrán que recurrir en primer lugar a su patrimonio para cubrir sus necesidades antes de recibir éstas, según el borrador de orden que ha elaborado el Gobierno Vasco. El Departamento de Empleo y Asuntos Sociales se ha reunido esta semana con los ayuntamientos de la comunidad autónoma para explicarles su intención de llevar a cabo una homogeneización que establezca unas prioridades y unos requisitos a la hora de acceder a las AES.
La principal novedad es que para acceder a estas ayudas se va a tener en cuenta el patrimonio del beneficiario. Hasta ahora, cualquier persona que, aparte de la vivienda habitual, tuviera menos de 40.000 euros de patrimonio podía recibirlas. El Gobierno Vasco quiere que a las AES accedan las personas o familias que más lo necesitan y la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, ya ha explicado ante el Parlamento Vasco que es incompatible reclamar AES para pagar recibos de agua o luz y tener en el banco 25.000 o 30.000 euros.
El ejecutivo autonómico también quiere establecer unos criterios generales para que las AES se destinen a los conceptos más urgentes en las necesidades de las personas o familias en todos los municipios de la Comunidad Autónoma Vasca. Por este motivo, ha elaborado unos parámetros que básicamente establecen que quien cuente con un patrimonio de más de 8.000 euros deberá primero recurrir a él antes de beneficiarse de las AES.
En la propuesta, aún abierta a modificaciones, se explica a los ayuntamientos que una persona o familia que reciba el 100% de la RGI, entre 600 y 900 euros, y que tenga un patrimonio de hasta 8.000 euros podrá recibir las AES de manera completa. A partir de esos 8.000 euros de límite, ajenos a la vivienda habitual, deberá recurrir a los fondos antes de poder acceder a las Ayudas de Emergencia Social.
También se han previsto una serie de tramos en los que disminuyen las aportaciones por AES a medida que crece el porcentaje de RGI que reciben los beneficiarios, hasta el 150% de esta renta social, momento en el que se deja de tener derecho a percibir las AES. Con ello, se pretende que haya un reparto más homogéneo de las ayudas y que éste se haga en base a unos criterios de progresividad más marcados que los existentes hasta ahora.
Además de este nuevo modelo, Lakua ha informado a los consistorios de que a partir de abril de 2011 los municipios deberán volcar trimestralmente la información sobre la gestión y los beneficiarios de las AES y no anualmente como hasta ahora, con el fin de disponer de un diagnóstico de la situación más ajustado en cada momento y conocer los niveles de necesidades de los municipios. Este borrador de orden de gestión anual de las AES se aprobará a la vez que el decreto que sirve de paraguas legal a estas ayudas.
ayudas en vitoria También en materia de reparto de ayudas sociales, el grupo municipal del PNV en Vitoria ha exigido al equipo de gobierno que aclare si su política en este sentido es la que proclama el alcalde, Patxi Lazcoz, o la que dicta el Gobierno Vasco a través de Gemma Zabaleta.
La polémica en la capital alavesa surgió a raíz de las declaraciones del concejal de Asuntos Sociales, Peio López de Munain, quien, según la concejala jeltzale Nerea Melgosa, se desmarcó de lo señalado por su alcalde y se alineó con Zabaleta al responsabilizar de la polémica en el presunto fraude de las ayudas sociales a la Diputación alavesa y no al ejecutivo autonómico. "Los perceptores de la RGI no pueden ser víctimas de las maniobras de desgaste del Gobierno Vasco hacia las diputaciones y ayuntamientos, a los que ha insultado con el fin de justificar el cambio de modelo de gestión", subrayó la representante del PNV.