Vitoria. La cultura "masculina-patriarcal que "propicia y tolera el ejercicio de la violencia de género y a quienes la ejercen es la causante de esta lacra, tanto en opinión de la Diputación de Álava como de la Plataforma Feminista de Gasteiz.
Es por ello que para erradicar esta desigualdad de género, el Consejo de Diputados de Álava aprobó ayer una declaración institucional con motivo del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres que se celebra mañana.
En el texto, la institución foral reitera su compromiso de "tolerancia cero" hacia la violencia contra las mujeres y renueva su compromiso con los derechos de este colectivo "como parte inseparable, integral e inalienable de los derechos universales".
Asimismo, el documento aboga por "erradicar esta lacra impropia de la condición humana" y expresa su voluntad institucional de seguir trabajando para eliminar la violencia machista y para intensificar los recursos que garanticen la protección de la vida, la integridad, la dignidad y el bienestar de las mujeres.
La institución foral también hace un llamamiento a la sociedad para que participe en la concentración de cinco minutos en repulsa a este tipo de violencia que tendrá lugar mañana, a las 12.00 horas, junto a la sede de la Diputación.
Quien también cree que la violencia sexista es fruto del "sistema heteropatriarcal capitalista" es la Plataforma feminista de Vitoria. Para concienciar a la sociedad alavesa ayer mismo anunció que el 25-N realizará una manifestación a las 19.30 horas en la Plaza de la Virgen Blanca.
Aunque la agrupación recordó el "dato terrible" de que en lo que va de año seis féminas han sido asesinadas en Euskadi, denunciaron que, en parte, ello se debe a la "desidia institucional" para frenarlas. "Las cifras de víctimas sólo ponen en evidencia la carencia institucional para poner medidas porque la violencia de género es un tema de segunda en las agendas políticas", criticó Maider Goikoetxea, de Feministas de Bilbao, junto con Saioa Polo, de Mugarik Gabe. La plataforma dice estar harta de que aún haya novios que no dejen vestir a sus parejas como quieran, que haya maridos que controlen los ingresos de ellas o de no poder salir a la calle con total libertad por el mero hecho de ser mujer. Por ello, reivindica la autodefensa para "pasar a la acción". En este sentido, llama a la movilización de la sociedad en protesta por el "silencio" del caso de Nora, la magrebí residente en Vitoria que desapareció el pasado 25 de octubre, ya que, a su juicio, "no hay actitud por buscarla".
Como prevención de este tipo de delitos, Ezker Batua propone un servicio telefónico para víctimas de malos tratos, sin orden de alejamiento o de sentencia. Su coordinador general, Mikel Arana, asegura que este servicio conectado con la Ertzaintza tendría como objetivo que "no haya en Euskadi una sola mujer con riesgo de violencia de género".