Imanol Querejeta y Javier Vizcaíno
JV.- Además de porque va mirándose el ombligo, ¿cómo distinguimos a un verdadero narcisista?
IQ.- Porque no admite una crítica, porque no admite que se le diga que no, porque está todo el tiempo trampeando para salirse con la suya, porque no hace más que alardear de lo que sabe, de sus amistades, y porque no es empático y, claro, la culpa de todo la tienen los demás.
JV.- ¿Nacen o se hacen? Mi gran temor, viendo cómo educamos a nuestros hijos e hijas hoy, es que estemos fabricando tremendos ególatras para el futuro. Los convertimos en centro del universo y, claro, acaban creyendo que lo son...
IQ.- No está claramente definido porque, como es de suponer, ninguno se pone en tratamiento (¿para qué?, si los demás saben menos que él). Pero puede ser un rasgo que se agudiza ante críticas severas que se le hacen durante la infancia.
JV.- ¿Ante críticas? Yo hubiera jurado que era al contrario, que no recibir una crítica a tiempo podía convertirte en un Narciso?
IQ.- No, es todo lo contrario. Como te acabo de decir, las personas excesivamente criticadas en su infancia son las que desarrollan preferentemente este tipo de personalidad. En el fondo, son débiles y autodevaluados, pero se expresan justo como si fuesen lo contrario.
JV.- Ya creciditos, no faltan a su alrededor personas que les dan cuerda. Cosa curiosa: no son pocos los narcisistas con club de fans.
IQ.- Sí, así es. El narcisista convence a la gente un tiempo durante el cual puede levantar pasiones. Pero el tiempo nos pone a todos en nuestro sitio, y cuando la sumisión ya no se da, vienen los enfrentamientos que, en donde hay un narciso, suelen ser muy intensos.
JV.- ¿Es el narcisismo una forma superlativa de autoestima?
IQ.- Sí, son personas con un concepto grandioso de sí mismos, aunque en el fondo, lo que les anima es una falta de seguridad que es la que les impide admitir que se equivocan y hacen mal las cosas como el resto.
JV.- ¿Hay grados? En todas las cuadrillas hay un "fanfa" o uno que sabe todo o que ha hecho de todo, pero en apariencia son inofensivos. ¿Son narcisistas sin eclosionar?
IQ.- No. En todas las cuadrillas hay una asignación de roles que algunos mantienen cara al público y luego en privado no los expresan. Todos desarrollamos estrategias para ganar nuestra posición y luego, una vez ganada, nos manifestamos de otra manera.
JV.- ¿Merece la pena hacerle ver a un narciso o una narcisa que no son tan maravillosos como se piensan?
IQ.- Depende de lo que te propongas. Desde luego, no variarán su actitud, pero a lo mejor haces lo que debes. Cuando lo que te está produciendo una persona de este perfil no se puede ignorar, lo mejor es expresarte con corrección, con claridad, con respeto, y dejar bien claro que no vas a discutir.
JV.- Lo mejor, como en tantas otras cosas, poner distancia. Pero, ¿Y si no es posible? ¿Si no te queda otro remedio que compartir espacio vital o laboral con alguien así?
IQ.- Pues, como decía en la respuesta anterior, intenta no entrar en discusiones estériles que lo único que te hacen es perder el buen humor. Si el narciso es tu superior, ya el asunto es más complicado, porque los grandes acosadores son narcisistas, envidiosos de las habilidades de sus subordinados, que se dedican a hacerles la vida difícil.
JV.- ¿Caben dos en el mismo corral? El duelo de egos puede ser a sangre y fuego...
IQ.- Caben un tiempo, pero al final tiene que prevalecer uno de los dos y el duelo puede ser espectacular porque además van a pedir adeptos incondicionales y no van a aceptar una respuesta neutral.
JV .- Sí habrá que reconocerles la capacidad para llegar arriba. Entre las figuras más reconocidas de las artes, el deporte o la política, no es difícil encontrar este tipo de personajes.
IQ.- A algunos sí y a otros, no. Ya te he comentado antes que muchos encandilan un rato, hasta que se les ve bien como son. Hay mucho narcisista que es un bluff.