bilbao. El caso del Motxo va a dar mucho de qué hablar. Ayer, tres días después de que el pesquero encallara en la franja costera de Deba, Eguzki se pronunció. Tras mostrar su "alegría porque no han existido pérdidas humanas" en este siniestro, el colectivo ecologista denunció "el vertido de miles de litros de gasoil que podría haberse evitado de haberse tomado las medidas oportunas", sobre todo teniendo en cuenta el alto valor ecológico de la zona, ya que se trata de un biotopo protegido. No obstante, la asociación fue aún más lejos al asegurar que las embarcaciones pesqueras "no respetan la normativa y faenan en este lugar mientras las autoridades miran para otro lado". Alto y claro.

"Mientras en el Gobierno Vasco se sigan pasando la patata caliente legislatura tras legislatura, al margen del partido que gobierne, de la situación de un sector pesquero que va degenerando a pasos agigantados al grito de sálvese quien pueda, este tipo de situaciones seguirán repitiéndose", lamentó Eguzki. A juicio del colectivo ecologista, es "hora de decir basta a la pesca indiscriminada de cualquier especie, tamaño, con cualquier arte, en cualquier zona".

Salvamento Marítimo, por su parte, sostiene que no se han encontrado manchas importantes de combustible y que, debido a las caracteríticas de biodegradación del gasoil, un hidrocarburo ligero, no hay rastros "significativos" de contaminación. No obstante, las labores de limpieza seguirán. Eso sí, tras el temporal, ya que se prevén grandes olas hoy y mañana. Cuando finalicen, habrá que desguazar el barco, encallado en una zona de acantilados, ya que no puede ser reflotado.