vitoria. Los casos de violencia machista siguen acumulando titulares en la capital alavesa. Tras los incidentes registrados en los últimos días, con detenciones de varios varones acusados de ser los presuntos autores de varios delitos de maltrato y amenazas a sus parejas, ayer se destapó un caso sangrante. El caso es que un vecino de Vitoria de 50 años ha sido detenido en la capital alavesa, trasladado a Pamplona e ingresado en prisión como presunto autor de la agresión sexual sufrida por una pareja de jóvenes navarros durante las pasadas fiestas de San Fermín.
Este suceso se ha esclarecido ahora en la investigación dirigida por la Policía Foral y en la que han colaborado el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil. Las pesquisas reunidas culminaron con la detención de S.A.A., con diversos antecedentes policiales, algunos relacionados con anteriores agresiones sexuales, y que en el momento de su detención el pasado 16 de agosto en la capital vasca se encontraba en libertad provisional.
Según indicó ayer el Ejecutivo navarro, los hechos se produjeron al acabar los fuegos artificiales del viernes, día 9 de julio, cuando los dos jóvenes, un chico y una chica, habían presenciado el espectáculo pirotécnico y se habían dirigido a la zona vallada que delimita la Ciudadela de Pamplona. Cuando estaban en las cercanías a los fosos, ya entrada la medianoche, se les acercó un varón que entabló conversación con la excusa de pedirles fuego. A continuación, esta persona amenazó a la pareja con un cuchillo y, aprovechándose de un cinto y un pañuelo de San Fermín, consiguió maniatar a sus víctimas y llevarlas a una zona más oscura en el interior de los fosos.
Una vez allí, primero registró sus pertenencias y se apoderó de los objetos de valor, y después les obligó a mantener contacto sexual entre ambos mientras él presenciaba la escena. Acto seguido, obligó a la joven a que repitiera la misma práctica pero esta vez con el ahora detenido. Tras ello, huyó.
El domingo, día 11 de julio, los dos jóvenes acudieron a dependencias de la Policía Foral y denunciaron lo ocurrido, por lo que se abrió una investigación que condujo a la identificación del agresor.
Por otra parte, la Policía Municipal gasteiztarra volvió a emplearse a fondo el pasado lunes para evitar una situación que podría haber llegado a mayores. En concreto, los agentes arrestaron a un individuo que decidió saltarse la orden de alejamiento que pesa sobre él para molestar a su ex mujer, circunstancia que no era la primera vez que sucedía. Los hechos sucedieron sobre las 17.30 horas, el varón detenido, de 33 años de edad, se presentó en el establecimiento. Según indicaron fuentes de la Guardia Urbana, el varón ya había actuado en términos similares en otras ocasiones haciendo caso omiso a los mandatos judiciales que le obligaban a estar alejado de su compañera y del lugar de trabajo de ésta. Por ello, una vez avisados los agentes, estos comprobaron las órdenes vigentes y decidieron arrestar al individuo en cuestión.