París. Alrededor de 30.000 peregrinos congregados en el santuario de Lourdes para celebrar la fiesta de la Asunción tuvieron que evacuar el lugar tras una llamada anónima que indicaba que había cuatro bombas en el santuario mariano ubicado en los Pirineos franceses.
La comisaría de Lourdes recibió una advertencia por teléfono durante el medio día ayer. Un hombre alertaba que cuatro artefactos explosivos, colocados en diferentes lugares del santuario, harían explosión a las 15.00 horas. Tras el aviso, las fuerzas de seguridad difundieron un mensaje para proceder al desalojo de los fieles.
Tras dos horas y media de búsqueda, los artificios de los servicios policiales de Bayona, apoyados por perros de rastreo, dieron por terminada su labor sin encontrar ningún explosivo y permitieron la reapertura del santuario.
Las ceremonias religiosas se retomaron a tiempo para que la procesión prevista en el complejo de Nuestra Señora de Lourdes, a las 16.30 horas, pudiera celebrarse.
Según informó la policía, la llamada que alertó sobre la supuesta colocación de las bombas fue efectuada desde una cabina pública.
La evacuación de los creyentes que se habían desplazado hasta Lourdes se desarrolló sin incidentes, con cierta serenidad y terminó alrededor de las 14.00 horas, informaron los servicios de prensa de prensa del santuario.
Durante el tiempo que el santuario permaneció desalojado, parte de los fieles se dispersó por las calles de la localidad de Lourdes, en el suroeste de Francia.
Otros, entre los que afloraron cánticos religiosos, permanecieron cerca de las entradas que dan acceso a las basílicas de la Inmaculada Concepción y del Rosario o a la iglesia subterránea de Pío X, todos ellos clausurados por las fuerzas de seguridad para ser examinados.
Por la mañana, los religiosos habían oficiado dos servicios para celebrar la Asunción de la Virgen, antes de suspender temporalmente el resto de las misas.
En París, donde se habían organizado dos procesiones con motivo de la festividad de la Asunción, no se modifico el programa de las congregaciones, informaron fuentes policiales.
No es la primera vez que el santuario recibe un aviso de bomba pues el 27 de octubre de 2002, la iglesia subterránea San Pío X, uno de los 22 lugares de culto emplazados en el complejo de 50 hectáreas que constituye Lourdes, tuvo que ser evacuada por un episodio similar.
Según las creencias católicas, el 11 de febrero de 1858 la Virgen María se le apareció por primera vez a Bernadette de Soubirous, una adolescente de 14 años. En una de las 18 apariciones, fue cuando la ahora santa Bernadette, por indicación de la Virgen, encontró el manantial de las curaciones
La peregrinación a Lourdes, la más célebre de Francia para conmemorar la Asunción, forma parte de la historia de ese país desde el siglo XVIII, cuando el monarca Luis XIII comenzó a organizar procesiones para agradecer a la Virgen sus victorias militares.