vitoria. Los monitores de actividades deportivas que prestan sus servicios en el territorio están otra vez en pie de guerra. Su convenio ya ha finalizado, por lo que los sindicatos instan a las empresas contratantes a que se sienten a negociar las nuevas condiciones laborales del servicio.

Sin embargo, parece que las compañías no están por la labor de escuchar las demandas de los trabajadores. Tras varios intentos de negociación, tan sólo una de ellas ha respondido a la llamada. Así las cosas, los sindicatos ELA, LAB y CCOO han convocado a todos los monitores a una asamblea que tendrá lugar el próximo miércoles en la sede de ELA, en la calle Manuel Iradier.

Según informaron ayer en un comunicado, el convenio que se aplica a quienes trabajan en las actividades deportivas dependientes de las instituciones en Álava finalizó su vigencia en diciembre de 2008. Por ello, las centrales llevan desde el pasado año intentando negociar un nuevo marco. "Sólo una empresa respondió, argumentando falta de legitimidad para negociar", aseguran. A la vista de la situación, los sindicatos están dispuestos a seguir con el intento.

Así, este mismo año se ha tratado de crear una mesa de negociación. "Por parte de la patronal acudió el representante de la asociación que engloba a las empresas que organizan actividades deportivo-recreativas culturales de Álava para decirnos que los empresarios rechazan la negociación", afirman en la nota de prensa.

ELA, LAB y CCOO insisten en que el convenio colectivo es "una herramienta clave" para regular las condiciones laborales de los trabajadores. Por eso, se niegan a renunciar otra vez, por lo que han decidido convocar al conjunto de los trabajadores y trabajadoras de estas empresas a una asamblea. En ella, las centrales informarán con detalle del desarrollo de este nuevo intento negociador. "Trataremos de hacer una fotografía lo más exacta posible de la situación de quienes trabajan en estas actividades, dispersas en empresas diferentes, muchos centros de trabajo, horarios y actividades muy distintas; e intentaremos diseñar la dinámica que, sobre todo de cara al próximo curso, desarrollaremos para forzar la negociación de un nuevo convenio para el sector", apuntan.

Cabe recordar que no es la primera vez que los monitores de actividades deportivas se movilizan con motivo de la negociación de su convenio. Sin ir más lejos, durante el año 2007, más de 4.000 usuarios de las piscinas municipales se vieron afectados por una huelga convocada por el colectivo de socorristas. El paro duró durante más de un mes y afectó también a algunos centros cívicos de la ciudad. El conflicto se recrudeció de tal manera que fue necesaria la mediación del Consistorio gasteiztarra.