madrid. Unos siete millones de personas están fuera de sus hogares, atrapados a muchos kilómetros de distancia, sin poder volver a sus casas debido al caos aéreo producido por las cenizas del volcán islandés Eyjafjallajökull. Este hecho producirá pérdidas de 1.500 millones de euros en las economías europeas, ya que muchos de ellos no podrán acudir a su puesto de trabajo.

Así lo señala un informe del banco Royal Bank of Scotland (RBS), que señala que esa falta de personal provocará "inevitablemente" una caída en la producción y reducirá la capacidad laboral de muchos países europeos "de una forma muy parecida a como lo hace una huelga".

Al mismo tiempo, las seis principales aerolíneas europeas -Iberia, British Airways, Air France-KLM, Lufthansa, easyJet y Ryanair- han dejado de facturar hasta ayer unos 600 millones de euros por las cancelaciones por la nube, que además les ha provocado unos gastos por valor de 250 millones de euros.

Según un informe del banco suizo UBS, la disminución en el volumen de facturación de estas compañías se situaría entre los 120 y 140 millones de euros diarios, mientras que sus pérdidas directas combinadas podrían oscilar entre 50 y 60 millones de euros. El impacto económico en cada aerolínea variará, según el estudio, en función de el espacio aéreo y la densidad de las rutas afectadas por las cancelaciones.

Según un informe de Citi, algunas aerolíneas podrían enfrentarse a dificultades financieras si las restricciones se prolongan durante "semanas o meses", lo que no afectaría a las grandes compañías, dado que "disponen de suficientes recursos" para resistir su impacto.

Por ello, la Comisión Europea "está preparada" para habilitar un marco similar al aprobado tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 para permitir que los estados miembros concedan ayudas a las aerolíneas afectadas.

La nube volcánica, que desde el jueves ha paralizado a los principales aeropuertos de Europa, sigue castigando a las aerolíneas, que ayer volvieron a cerrar una nueva sesión de fuertes pérdidas, que ha comenzado a afectar también a otras compañías con participación en el sector turístico. En el mercado español, Iberia cerró la jornada con una caída del 2,65%, pero la peor parte fue para Ferrovial --compañía que controla el grupo de aeropuertos británico BAA- que ayer lideró los descensos del Ibex, con un 4,16%. En el mercado continuo, Vueling cedió un 3,64%.

Pese a que los mercados se han tranquilizado y las compañías han logrado aminorar las caídas, las advertencias de la industria sobre las consecuencias económicas hacen mella en el sector.