REIKIAVIK. La erupción del volcán subterráneo del glaciar Eyjafjallajökull, al sur de Islandia, se mantiene estable y no se habían registrado episodios de crecida de las aguas por el deshielo del glaciar en las últimas 36 horas, informaron ayer las autoridades islandesas.

El derretimiento del hielo se estaba produciendo a menor velocidad, aunque en cantidad suficiente para que el agua todavía alcance el magma y permitir que se sigan produciendo explosiones, informó Protección Civil. Además informó de que se han producido "severas" precipitaciones de ceniza al sur de Eyjafjallajökull, que vive hoy su quinto sexto de erupción. Aunque también se ha constatado que la columna de humo era ayer de entre 4 y 5 kilómetros de altura, frente a los 11 kilómetros que alcanzó poco después de la erupción.

La Dirección Nacional de Salud mantiene la recomendación del uso de mascarillas al salir a las calles en las zonas más afectadas por las precipitaciones de ceniza, e informó de que no se han detectado problemas de salud de importancia relacionados con la erupción.

Las autoridades islandesas enfatizaron que el 90% del país, incluida el área de Reikaivik, no se ha visto afectada de forma directa por la erupción y que a excepción de las carreteras próximas a la zona de crecidas junto al glaciar, el resto de la infraestructura viaria funciona.

Los expertos reconocieron la dificultad de predecir la evolución de la erupción en Eyjafjallajökull, ya que el único episodio de actividad del que se tiene información se remonta a 1821. Esa erupción deduró más de un año y conllevó una expulsión significativa de ceniza, aunque de forma intermitente.