vitoria. Han desvalijado y reventado pisos, garajes y camarotes en las nuevas urbanizaciones de los barrios noveles de Vitoria. Se aprovechan de que los vecinos acaban de aterrizar en sus viviendas, que nadie se conoce las caras y que en plena confusión derivada de la operación mudanza hay muchos accesos libres. El modus operandi es muy similar en todos los asaltos, por lo que la Policía Municipal ha iniciado una investigación para determinar si hay una banda organizada de individuos especializados en atracos a domicilios. A lo largo de 2009, la Guardia Urbana registró 55 denuncias por robos en el interior de pisos y contabilizó otras 36 tentativas de asalto a domicilios.
Ayer, el concejal de Seguridad Ciudadana, José Manuel Bully, no quiso ofrecer detalles concretos sobre las pesquisas que se llevan a cabo para no malograr la operación, si bien subrayó que el Departamento redoblará sus esfuerzos para poner fin a esta situación. También explicó que, al margen de la investigación, la Policía Municipal actúa en dos frentes para tratar de frenar estos robos. El primero, incrementando la presencia de patrullas en las calles de los nuevos barrios para disuadir a los ladrones y el segundo haciendo que agentes de paisano vigilen las urbanizaciones de reciente cuño.
A lo largo de los últimos meses, Mariturri ha despertado el interés de los amigos de lo ajeno y las oleadas de robos en camarotes y garajes se suceden sin interrupción. Los vecinos de la zona padecen con indisimulada impaciencia un clima de inseguridad que se traduce en al menos un robo por semana. Según los datos que maneja la asociación de vecinos, los asaltos alcanzaron la cota de los 200 el pasado diciembre y en la cerrajería Canuto les cuentan que desde hace tres semanas tienen un operativo exclusivamente para Mariturri.
Incluso el alcalde ha opinado al respecto y señalado que el boom de los robos en los nuevos barrios puede estar vinculado a la escasa presencia vecinal, que deja vía libre a los cacos, si bien ha insistido en que lo primordial es ofrecer la mayor seguridad posible y cuanto antes a estas zonas. Además del incremento de control policial, el primer edil abogó por la adopción de medidas sencillas como la mejora de la iluminación, la reducción del tiempo transcurrido desde que se abre y se cierra la puerta automática de un garaje, o que el acceso a bajos y camarotes a través de los ascensores se haga siempre con llave.
preocupados, no alarmados No son estos los únicos atracos que preocupan al concejal de Seguridad Ciudadana. Los robos con fuerza en el interior de vehículos, es decir, aquellas sustracciones producidas tras forzar la cerradura o romper una ventanilla, siguen aumentando en los diferentes barrios de Vitoria pese al desmantelamiento de grupos organizados llegados de otras ciudades y al arresto de más de una treintena de individuos cazados in fraganti o con pruebas contundentes en sus manos.
A lo largo de 2009, según precisó José Manuel Bully, se han cometido 1.092 de estos robos y se han practicado 35 detenciones que han dado como resultado 15 imputados. El edil señaló que un solo asalto cometido en un garaje y que afecte a diez vehículos cuenta en los partes policiales como diez robos, de ahí que la cifra de arrestos sea más baja que el número de delitos.
Bully señaló que la Policía Municipal de Vitoria está realizando un buen trabajo en este ámbito y subrayó que los miembros del Departamento de Seguridad Ciudadana están "preocupados, pero no alertados" por el creciente robo de vehículos en la capital alavesa.
ciudad segura "Vitoria sigue siendo una ciudad segura", reiteró Bully, si bien agregó que inquieta el incremento de las infracciones penales denunciadas ante la Policía Local en 2009 que, aunque inferior al registrado en 2008 -aumentaron en torno a un 30% respecto a 2007-, el aumento de delitos y faltas ha sido del 16,51%. Casi un 50% de los atestados se corresponden con infracciones penales leves, de las que la inmensa mayoría son contra el patrimonio. El mayor aumento numérico se ha producido principalmente en los robos en interior de vehículos. Al margen de los más de un millar de robos con fuerza en el interior de turismos consumados a lo largo de 2009, la Policía Local detectó otros 317 en grado de tentativa, que dieron lugar a 15 detenciones y a una imputación final.