Las carreteras alavesas vivieron ayer el inicio de la operación Salida de Semana Santa. Desde después de comer se observó un repunte de la intensidad del tráfico en los puntos habituales. Pese a no registrarse retenciones importantes, sí que hubo ciertos colapsos en momentos puntuales en la confluencia de la N-I con la AP-68 y los viales que llevan a Logroño y a la comarca de Rioja Alavesa. Para los próximos días se esperan las peores aglomeraciones del año.