lescun/pamplona. Los pamploneses Armando Nieto Lacunza y Alfonso González Rey no comparten solamente su afición por la montaña, sino que tienen varios cordones umbilicales que les hacen ser dos amigos inseparables. "Son amigos de toda la vida y quizá por eso son los socios mejor avenidos que conozco", comentó ayer Carlos, hermano de Armando y pendiente del teléfono durante toda la tarde para comprobar si desde Francia llegaba alguna buena nueva. Carlos trabaja en la empresa Aislamientos Idoy, dedicada al aislamiento térmico mediante la instalación de tabiquería seca y pladur y ubicada en el polígono de Noáin Esquíroz. De esta empresa son socios tanto Armando como Alfonso, que también comparte lugar de trabajo con varios de sus cinco hermanos. Esta firma la levantaron ambos hace casi dos décadas, después de curtirse varios años como especialistas del sector. "Son gente que se ha hecho a sí misma, autodidactas y que supieron sacar adelante su empresa", afirmaron varios familiares. Aislamientos Idoy cuenta en la actualidad con una plantilla de unos diez empleados.

Amén del trabajo y la montaña, ambos proceden del barrio de La Milagrosa-Arrosadía y cursaron estudios en el colegio de Jesuitas de Pamplona y en el antiguo Instituto Ximenez de Rada (actualmente Plaza de la Cruz), donde encontraron otra actividad común: jugaron a hockey sobre patines durante varios años hasta la categoría de juveniles en un equipo ya desaparecido. Más adelante, han seguido coincidiendo en la práctica deportiva de carreras de montaña, tanto en bici como a pie. Así, a Armando Nieto se le ha visto en las últimas ediciones de la Media Maratón Roncesvalles-Zubiri y en la disputa de la Extreme Bardenas (la corrió al menos en 2005 y 2006).

Todo el mundo que les conoce habla maravillas de Armando y de Alfonso, dos grandes deportistas atraídos por la fascinación que les produce la montaña. >j.m.s./e.c.