Agentes de la Policía Nacional intervinieron junto a la Policía Federal de México en la liberación, hace una semana, de la hija de un funcionario de la Embajada española, de tan sólo dos años, que fue secuestrada y mantenida en cautiverio durante cuatro días por su niñera. La cuidadora, que aprovechó uno de los paseos habituales con la menor para raptarla, pidió un rescate de 4.000.000 de pesos mexicanos y amenazó con matarla si la Policía intervenía. Sin embargo, gracias al dispositivo dispuesto por la policía mexicana, que negoció el pago del rescate con la secuestradora, se descubrió que ésta era la propia niñera y que actuaba en solitario.
