Niños y parlamentarios; dos colectivos tan diferentes, pero a la vez con tantas cosas en común. "Somos de esos hermanos que se pelean bastante si nadie nos vigila, pero estamos condenados a entendernos", explicaba ayer ante un auditorio atípico José Antonio Pastor. El socialista tuvo que enfrentarse junto con otros miembros de la Cámara vasca, entre los que estaba su presidenta, Arantza Quiroga, a una verdadera prueba de fuego que lograron superar con buenas palabras y promesas a largo plazo.

Todos ellos se sometieron a las preguntas que formularon, sin pelos en la lengua, una treintena de niños que ayer fueron a visitar el Parlamento Vasco. Acudían en representación de Hirukide, la asociación de familias numerosas, que entregó al Legislativo el vídeo Señores gobernantes, que recoge de una forma original y simpática lo que este colectivo lleva reclamando más de una década ante las diferentes administraciones y gobernantes: "justicia y reconocimiento".

Al igual que en el vídeo, ayer fueron los niños los que tomaron la palabra. El primero en romper el hielo fue Diego Cobo: "¿Por qué no puedo estar más tiempo de vacaciones con mis padres?", preguntó. Quiroga, muy concienciada por cierto con este colectivo, ya que es madre de familia numerosa, fue la primera en responder. "Tenemos un calendario desfasado, tendríamos que llegar a un término medio y buscar una solución por ambas partes; reconozco que es una asignatura pendiente", respondió. Tampoco el pequeño Joseba Ortiz de Zárate entendía por qué niños y mayores, teniendo una jornada similar, coinciden durante tan poco tiempo en casa. "¿Por qué llegamos nosotros a las cinco de la tarde a casa y nuestros padres no llegan hasta las siete?".

Los problemas que encuentran las familias a la hora de conciliar su vida personal y laboral centraron buena parte del debate. En este sentido, la presidenta del Parlamento Vasco recordó una iniciativa que aprobó el pasado jueves la Cámara para que los colegios organicen actividades extraescolares durante periodos vacacionales. "Le hemos pedido al Gobierno Vasco que elabore incluso un mapa y concrete esta iniciativa para que los padres puedan disfrutar de este servicio", añadió. La parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, quiso ir incluso más lejos al apelar a la responsabilidad de los hombres para que dicha conciliación sea un reto posible de lograr.

Entre las reivindicaciones de Hirukide está también la que afecta al acceso a la vivienda. "El 32% de las familias numerosas vivimos en un vivienda pequeña y no tenemos opción de movernos a una más grande, ¿qué vais a hacer los políticos al respecto?", preguntó Pablo González. A lo que Pastor respondió que se está estudiando la posibilidad de reservar Viviendas de Protección Oficial a este tipo de familias, a través de unos cupos, si bien añadió que "es un problema que afecta a todos los sectores".

Largo camino Como conclusión, Hirukide recordó que aunque se ha avanzado mucho en materia de derechos, "todavía queda un largo camino por recorrer" para que cada pareja pueda tener el número de hijos que desea. En este sentido, el presidente de la asociación, Ignacio De Guinea, insistió en la necesidad de actuar, por ejemplo, en materia de tasas y cobros por consumo. En este sentido, reprochó que los pañales o los biberones no sean considerados como productos de primera necesidad. También pidió que en el consumo de agua o electricidad, por ejemplo, "se tenga en cuenta el número de miembros por cada unidad familiar".

Hirukide, un colectivo que agrupa a más de 5.300 familias en toda la Comunidad Autónoma Vasca, nació a finales de los años 90 con el fin de sensibilizar en torno a las necesidades que presentan las familias con tres o más hijos. Entre sus principales objetivos está el de alcanzar una equiparación con los países europeos en cuanto a medidas de conciliación, ampliando las bajas por maternidad y paternidad, las cuantías económicas para las bajas o tratando de igualar los horarios laborales y escolares.