PUERTO PRÍNCIPE. El presidente de Haití, René Preval, estimó el pasado fin de semana que la cifra oficial de muertos a causa del terremoto que el pasado día 12 arrasó el país caribeño ha ascendido, según los últimos recuentos, hasta las 250.000 personas. Además Preval afirmó que hay en torno a un millón de haitianos sin hogar, lo que significa cerca de un octavo de la población del país caribeño.
A lo que el mandatario añadió que es necesario realojar a las personas a las que el seísmo dejó sin hogar antes del mes de marzo, fecha en la que comienza la estación de lluvias en el área del Caribe.
Una de las prioridades fundamentales que también corroboró ayer la Comisión Europea (CE). El ejecutivo de Bruselas, indicó que se ha convertido en urgente la necesidad de disponer de chapas metálicas para construir refugios por tratarse de "la estrategia más apropiada" para hacer frente a las próximas temporadas que llegarán de lluvias y huracanes.
En ese sentido, la CE precisó que no es necesario el envío de más tiendas de campaña de las que ya se han aceptado muchas -señaló que hay otras 45.000 en camino-, y que hay que dar prioridad al laminado metálico. En su opinión, éste es un material de bajo precio que además puede obtenerse en la región, de forma que se ahorrarían los costes de tener que enviarlo.
En cuanto a los principales desafíos a los que debe hacer frente la ayuda internacional, la Comisión se refirió a la "falta de capacidad gubernamental para coordinar". Y, a su juicio, las necesidades de la recuperación de la economía deben atenderse antes de la principal temporada de plantación, que tiene lugar en marzo. Una reactivación del secotr agrícola que el Gobierno de Haití ha calculado que costará cerca de 700 millones de dólares.
Cifras a parte, el Fondo de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) se ha puesto a trabajar para lograr tal objetivo. Para el director de respuesta de emergencias de la FAO en Haití, Alexander Jones, se trata de una medida "urgente" debido a la cercanía de la temporada de plantación qu es en marzo, una fecha de la que depende "el 60% de la producción agrícola del país", aseguró.
En concreto, la agencia de la ONU ha comenzado a limpiar los canales de irrigación en la zona del epicentro del terremoto y en sus alrededores. Según ha constatado la FAO, la zona agrícola resultó totalmente devastada. Los deslizmientos de tierra bloquearon los canales, amenazando así unos cultivos que ya estaban prácticamente listos para ser cosechados.
protestas Por otro lado, miles de haitianos se manifestaron este domingo cerca de Puerto Príncipe, en protesta por la supuesta corrupción en el reparto de la ayuda internacional. Se trató de una de las propuestas populares más numerosas desde el terremoto. La mayoría de los manifestantes eran mujeres, que son a las únicas a las que se les entrega la ayuda internacional debido a que éstas son más proclives a compartirla que los hombres.
El personal extranjero en el país sostiene que parte de los alimentos que distribuyen entre la población (especialmente arroz) acaba siendo vendido en el mercado negro. Una práctica que parece inevitable en un país que, según Transparencia Internacional, se encuentra entre los diez más corruptos del mundo.