vitoria. El imparable incremento de la delincuencia en Vitoria enfrentó ayer en el Ayuntamiento al equipo de gobierno y al PP, principal grupo de la oposición. Marian Castellanos, concejala popular, invitó al edil de Seguridad Ciudadana, José Manuel Bully, a "reflexionar" sobre los últimos acontecimientos que se han producido en la ciudad con los datos en la mano: durante el pasado enero, la Policía Local registró hasta 521 denuncias derivadas de hechos violentos, el 40% de ellas por robos con violencia e intimidación y en el interior de vehículos. 17 expedientes al día que, a juicio de José Manuel Bully, deben servir de "motivación para seguir trabajando". El concejal se muestra, según aseguró, "sí preocupado pero no alarmado" por esta circunstancia.
Castellanos puso también sobre la mesa las "reiteradas quejas" de vecinos de distritos como San Cristóbal, Adurza, Sansomendi o Txagorritxu debido al creciente número de robos y le instó a reconsiderar la idea de "recuperar" una Policía de barrio en todos los distritos de la ciudad. "Ya es hora de tomar medidas", insistió la edil del PP. Bully, que acusó a Castellanos de "hacer fuego" y "hablar mal de la ciudad", utilizó el símil cinematográfico para reprenderla. "Habla de la ciudad como un cine, pero en él siempre se ve una película de terror y no una comedia". En otro orden de cosas, el edil de EA, Antxon Belakortu, recriminó al equipo de gobierno por el "show" del pasado viernes en el desalojo de los bartolos. "Se ha hecho el ridículo y eso no ayuda absolutamente nada", censuró Belakortu, quien comparó el operativo de desahucio del clan gitano con una acción conjunta de "El coche Fantástico y El Equipo A", pero "sin ningún resultado".