madrid. El juez del estado de Nueva Jersey Donald Venezia condenó ayer a 14 años de cárcel a María José Carrascosa, la española encarcelada en Estados Unidos desde 2006 por un conflicto relacionado con la custodia de la hija que tuvo con un estadounidense. "Sostengo que soy inocente. Le pediría una nueva oportunidad para demostrar mi inocencia, como ya ha dictaminado un tribunal internacional", pidió al juez, en la sala antes de conocer su sentencia por los nueve delitos de los que en noviembre un jurado la declaró culpable.
Esposada y con el traje verde de uniforme de presa, escuchó entre lágrimas al juez decir que su caso era "una auténtica desgracia. Se trata de un caso de odio y venganza que ha creado usted, quien ha considerado a su hija una mera propiedad, una pieza en el tablero de ajedrez. Entérese: el juego se ha acabado". La sentencia, que puede ser apelada, supone que si la cumple en su totalidad, su hija, Victoria Solenne, será mayor de edad a su término (nació en 2000).
El juez dijo también que esa sentencia, "es lo que merece por arrancar a su hija de sus propios brazos y de los de su ex marido". "Usted debería de pensar que en estas Navidades su hija no tendrá ni a una madre ni a un padre a los que abrazar, ni abrirá los regalos con ustedes", aunque también señaló que reconsideraría la condena si la niña vuelve a EEUU.
La española, de 44 años y abogada de profesión, estuvo casada con Peter Innes entre 1999 y 2004, y su hija, que vive en Valencia junto a sus abuelos, nació en abril de 2000. En 2005 decidió llevarse a España a la menor y, desde entonces, se ha negado a devolverla a EEUU, por lo que se ha visto envuelta en una compleja situación legal, que se ha ido complicando y en la que existe un conflicto entre la jurisdicción española y la estadounidense.
Carrascosa siempre ha defendido su decisión de viajar a España con su hija, porque quería huir de Innes, a quien acusó de maltratarla y de haberla intentado envenenar lentamente con el supuesto objetivo de quedarse con su patrimonio.
Atrapada en EEUU El proceso se inició cuando el 23 de agosto de 2006 la Corte Superior de Nueva Jersey decidió, a petición de Innes, que en el plazo de diez días la madre debía entregarle a la niña. Como Carrascosa estaba esas fechas en EEUU, ese tribunal le retiró el pasaporte y le prohibió abandonar el país. Ante la imposibilidad de regresar a España y de entregar a su hija en ese plazo, se ocultó para tratar de evitar su encarcelamiento, hasta que fue detenida el 21 de noviembre de 2006.