Vitoria. El número de menores de doce años víctimas de accidentes de tráfico en Euskadi se ha reducido un 65% en los últimos ocho años. Las cifras de heridos graves han descendido de forma acusada, y todavía más las de fallecidos. En ello tiene mucho que ver el grado de concienciación de los conductores, que han entendido cómo adoptando ciertas medidas de precaución se pueden evitar algunos disgustos. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer y por eso el Gobierno Vasco acaba de lanzar una campaña informativa para promover la seguridad infantil en la carretera.

La campaña, denominada Hasieratik seguru -Seguridad desde el comienzo-, llegará a las familias con hijos menores de doce años a través de los Centros de Salud, hospitales de Osakidetza y algunos ayuntamientos. El fin es promover el uso de los dispositivos de retención infantil con el propósito de que, en caso de que se produzca un accidente, el daño sea el menor posible.

Entre 2001 y 2008 el uso de sujeciones de seguridad entre menores accidentados aumentó del 31% al 73%. En este periodo de tiempo el número anual de víctimas se redujo de 366 a 130. Es más, en lo que va de año se han registrado 109 menores que han sufrido algún tipo de accidente mientras que viajaban en un coche.

La cifra de fallecidos ha bajado también de forma considerable. El pasado año, de hecho, no hubo que lamentar ninguna muerte; nada que ver con lo ocurrido en 2003, cuando seis menores de doce años perdieron la vida. El año 2009, sin embargo, se va a cerrar con una víctima mortal. En cuanto a los heridos graves, en 2001 se contabilizaron un total de 30 y en 2008 tan sólo dos. Este año, la cifra ha subido levemente, al registrarse ocho heridos graves.

Es por ello que se ha puesto en marcha esta campaña, a través de la cual se quiere concienciar a los padres sobre la eficacia de estos mecanismos y reducir con su uso la gravedad de las lesiones en caso de accidente. También se pretende que los menores adquieran desde pequeños hábitos correctos de protección en los desplazamientos.

La campaña se centra en la distribución de material informativo entre padres y madres de menores de doce años. La información se presenta a través de folletos y carteles. En ese material se explican los diversos sistemas de retención infantil que existen en el mercado y su clasificación según la edad y el peso del niño. Además, en los folletos se insiste en las ventajas de su uso y los peligros que conlleva viajar con un niño mal sujeto dentro del vehículo. En total se han editado 20.000 folletos y 2.000 carteles. Cada uno de los folletos incluye una pegatina para el vehículo con el símbolo de peligro que advierte de que a bordo viaja algún menor de edad.

La norma actual obliga a usar dispositivos de retención infantil hasta alcanzar los 135 centímetros de altura. Diferentes estudios, manejados por la Dirección de Tráfico, confirman que el uso correcto de sillas infantiles reduce un 40% las lesiones mortales y un 70% la posibilidad de sufrir heridas graves.

La información se difundirá a través de los Servicios de Pediatría y Matrona de los cerca de 400 centros de salud y 18 hospitales de la red sanitaria. Otro canal de divulgación de la campaña son los 18 ayuntamientos, entre ellos las tres capitales, con los que la Dirección de Tráfico colabora en materia de educación para la movilidad segura.