MADRID. La detención de estos tres acosadores, dedicados al "grooming", ha sido posible después de que en un descuido, uno de los hermanos mostrara su imagen a una de las víctimas.

En ese mismo instante, la joven le hizo una fotografía con su teléfono móvil que posteriormente ha permitido a los investigadores su identificación.

Según ha informado la Policía, la operación se inició a raíz de la denuncia interpuesta por la madre de una de las víctimas, de 14 años.

La mujer manifestaba que su hija estaba siendo víctima de amenazas y abuso sexual por parte de uno o varios individuos que, tras contactar con ella a través de Internet y ganarse su confianza, la convencieron para que enviase imágenes de ella desnuda para realizar "cibersexo".

Una vez obtenidas las fotografías comprometidas de la menor, la adolescente comenzó a sufrir amenazas para que continuase enviando más y se mostrase a través de la webcam.

El primer contacto entre la víctima y uno de los detenidos se produjo en casa de una amiga.

Reunidas cuatro menores, contactaron a través de Internet con un individuo que afirmaba ser también menor de edad y que las convenció para que se desnudaran ante la cámara.

En posteriores sesiones, los "ciberacosadores" pidieron a una de las niñas el envío de más fotos completamente desnuda y ante su negativa, comenzaron las amenazas.

La menor fue obligada a realizar determinadas acciones de índole sexual siguiendo las indicaciones de los acosadores, aunque consiguió hacer una fotografía a uno de los hermanos, lo que ha facilitado su identificación.

Con los datos aportados por la menor, se pudo localizar a una segunda víctima, de 15 años y amiga de la primera, con la que habían actuado de la misma forma.

Los agentes supervisaron varios ordenadores de las víctimas y determinaron que los "ciberacosadores" eran tres hermanos que residían en el mismo domicilio y que también habían facilitado a las jóvenes enlaces a páginas web con contenido pornográfico de adultos y niños.

Los tres mostraban en la web un perfil de menores de edad para captar a nuevas víctimas.

En el domicilio de los detenidos se han encontrado diversos archivos de pornografía infantil y CD y DVD grabados.

Uno de los arrestados tenía un total de 571 contactos -muchos de ellos menores de edad- en la libreta de direcciones del correo electrónico y programas de chat.

Además se han intervenido dos discos duros, un teléfono móvil en el que aparece registrado el número de una víctima y diversa documentación.

Igualmente los agentes comprobaron en el momento de realizar el registro, que se encontraban en pleno proceso de descarga archivos cuyo nombre y contenido correspondían a pornografía infantil.