Vitoria. La crisis ha entrado de lleno en el hogar de miles de ciudadanos alaveses, quizá todavía con más virulencia en lo que va de 2009. Los datos recopilados a día de hoy por Cáritas, al menos, hablan en ese sentido. Hasta el pasado 1 de noviembre, un total de 1.209 unidades familiares residentes en el territorio histórico recibieron apoyo económico por parte de la organización humanitaria, 143 más que en todo 2008. Y la media mensual de familias que recurren a Cáritas para percibir otro tipo de ayudas supera las 700 en lo que va de 2009, una cifra que también tiende al alza. "Vienen tiempos duros", sintetizó el director territorial de Cáritas, Ignacio Loza.
Sobre todo porque el perceptor tipo de estas ayudas se encuentra "en una situación extrema" y ya encaja en cualquier tipo de perfil. Sin posibilidades de ingreso y, por ende, gravísimas dificultades para comer, mantener una higiene correcta o un techo digno en el que vivir. Familias, además, que se unen a esas personas que, antes de comenzar la crisis, recurrían a la solidaridad de Cáritas como también hacen ahora: inmigrantes sin papeles, mayores con pensiones "míseras" y personas abandonadas en su soledad.
El colectivo presentó ayer una nueva campaña de Navidad "que vuelve a situarse en el entorno de la crisis, una compañera desagradable que se ha quedado entre nosotros". Loza lanzó al aire un mensaje que debe llevar "a la reflexión y al compromiso" de toda la ciudadanía, y que a la postre se ha convertido en el lema fundamental de esta campaña: "Si deseas cambiar el significado de sociedad de valores, acepta a todos por igual".
Su celebración coincidirá con la entrada del que oficialmente será el Año Internacional de Lucha contra la Pobreza, el próximo 2010. Loza advirtió en este sentido que se trata de "una extraordinaria oportunidad para saber si apostamos por una sociedad más justa".
Recortes El director se refirió a la peligrosidad que podría suponer de aquí en adelante el recorte de los servicios sociales básicos para los más necesitados, en consonancia con la austeridad que ha marcado la elaboración de los presupuestos en las distintas instituciones. Y se preguntó si "podríamos sentirnos verdaderamente satisfechos con nuestras cuentas públicas algo más saneadas pero conscientes de que la alavesa no fuera una sociedad solidaria".
La coyuntura económica también ha tocado la puerta de la propia institución católica, que va a generar un déficit del 10% en ayudas económicas, una cifra que podría alcanzar el 25% si se tiene en cuenta el total del presupuesto previsto para 2009. Ramón Ibeas, secretario general de Cáritas, anunció que la institución elaborará un presupuesto "expansivo para cubrir el déficit" de cara al próximo ejercicio. Por suerte, existe un dato para la esperanza, porque la sociedad alavesa ha respondido a la hora de dar donativos: Hasta noviembre, Cáritas ha recaudado 453.000 euros en donativos, por los 396.000 de todo 2008.