La estadounidense Amanda Knox y el italiano Raffaelle Sollecito han sido condenados, respectivamente, a 26 y 25 años de cárcel, por el asesinato en 2007 en la ciudad de Perugia de la joven británica Meredith Kercher, estudiante del programa de intercambio universitario Erasmus. La sentencia establece además que los condenados deben indemnizar con un millón de euros al padre y a la madre de Kercher. Tras el anuncio de la sentencia, los padres de la joven estadounidense Amanda Knox, informaron de que recurrirán la sentencia. "Amanda es inocente y seguiremos luchando por su libertad", declararon sus padres, Curt Knox y Edda Mellas.
