vitoria. El Parlamento Vasco pidió ayer que los ayuntamientos alaveses incluidos en el área de influencia de la central nuclear de Santa María de Garoña -sobretodo, Valdegovía y otros municipios de Añana que limitan con la provincia de Burgos- se puedan acoger a las ayudas previstas con motivo de la clausura de la planta atómica. Todos los grupos de la Cámara, excepto el PP que se abstuvo, apoyaron la petición de que el territorio histórico sea incluido dentro de las actuaciones estatales de promoción económica y del empleo de la zona.

El pasado mes de octubre la Secretaria General de Industria aprobó una resolución de convocatoria de las ayudas para actuaciones de reindustralización en la zona de influencia de la central a lo largo de 2010. El texto aprobado ayer valora las menciones que el plan de dinamización de la zona de influencia de la central pueda hacer para reconocer que Álava es una zona afectad por la pérdida de empleo derivada de la central, tanto en municipios ubicados en el perímetros de hasta diez kilómetros, como en el de entre diez y treinta kilómetros.

El caso es que el Consejo de Ministros aprobó el pasado 20 de noviembre el citado plan de dinamización, que se extenderá de 2010 a 2013 y que supondrá una inversión directa de 900 millones de euros. Con ello, el Ejecutivo central pretende abrir nuevos espacios de oportunidad y empleo en la zona, a partir de la diversificación de las fuentes de riqueza para hacerlas estables y sostenibles para el futuro. En principio, su ámbito territorial es el determinado como área de influencia por el Plan Básico de Emergencias Nucleares y comprende 78 municipios con 97.214 habitantes, distribuidos en tres comunidades autónomas: Castilla y León (Burgos), donde se ubica la mayor parte de localidades, La Rioja y el País Vasco (Álava y Bizkaia).

El Gobierno ha diseñado una estrategia de desarrollo de la zona, sustentada en la privilegiada situación geográfica del entorno de la central, en la calidad de su mano de obra y en la extensa bolsa de suelo industrial. El plan desarrollará casi una treintena de medidas englobadas en cinco ejes: regeneración del tejido industrial y empresarial; desarrollo de nuevas infraestructuras; potenciación del empleo; refuerzo del turismo, así como un desarrollo rural sostenible e impulso a la innovación y el desarrollo tecnológico. Una de las medidas importantes contenidas en el plan, en el ámbito de la industria, es la concesión de ayudas a la reindustrialización, que van a representar 100 millones de euros de financiación durante cuatro años, 25 de ellos ya el próximo año.

En cualquier caso, el Parlamento también acordó ayer instar al Gobierno Vasco a solicitar la incorporación de las administraciones vascas al Consejo para la Dinamización Económica y del Empleo en los términos previstos en el citado Plan. También instó a la coordinación entre ayuntamientos afectados, la Diputación de Álava, el Gobierno Vasco y el del Estado para la ejecución del Plan.